El próximo 5 de junio se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, el cual comenzó a celebrarse en 1974 y ahora es una plataforma mundial de divulgación pública; como cada año, dicha fecha se organiza en torno a un tema para centrar la atención en una cuestión particular y apremiante: el tema del año 2019 gira en torno a la contaminación del aire.
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha referido que la contaminación del aire causa cada año alrededor de siete millones de muertes prematuras, el equivalente a 800 muertes cada hora; también ocasiona problemas de salud de largo plazo, como el asma, y frena el desarrollo cognitivo de los niños.
Además se calcula que nueve de cada diez personas en el planeta están expuestas a niveles de contaminación atmosférica que superan los de las directrices sobre la calidad del aire marcadas por la OMS; como consecuencia, nuestra esperanza de vida es menor y algunas economías se están viendo perjudicadas.
Actualmente, cada vez más personas comprenden la magnitud de este problema y entienden que debemos tomar medidas para enfrentarlo; también a medida que crece el movimiento global para hacer frente a la contaminación del aire, los científicos e innovadores trabajan en productos y tecnologías para hacer frente al desafío y eliminar las emisiones peligrosas que se filtran en nuestros pulmones e intensifican el cambio climático.
Y es que como ha señalado en su mensaje por el Día Mundial del Medio Ambiente, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, si queremos mejorar la calidad del aire, debemos saber a qué nos enfrentamos: "Las muertes y enfermedades derivadas de este tipo de contaminación se deben a unas partículas diminutas que penetran en nuestro organismo cada vez que respiramos; estas partículas son producto, entre otras cosas, de la combustión de los combustibles fósiles que utilizamos para obtener energía y desplazarnos, de la actividad de la industria química y minera, de la quema de residuos al aire libre, así como de bosques y campos, y del uso de combustibles “sucios” para cocinar y calentar los hogares, algo que supone un importante problema en el mundo en desarrollo".
Muchos de estos contaminantes atmosféricos contribuyen también al calentamiento del planeta; un ejemplo es el carbono negro que producen los motores diésel y las cocinas que emplean combustibles “sucios”, así como la quema de desechos, y que es extremadamente nocivo cuando se inhala.
Reducir las emisiones de este tipo de sustancias no solo mejorará nuestra salud, sino que podría aminorar el calentamiento global en hasta 0.5 grados centígrados en los próximos decenios, de acuerdo con datos de la ONU.
Según el organismo internacional, se ha demostrado que hay muchas maneras de limpiar el aire y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a un mismo tiempo, como prescindir de las centrales eléctricas de carbón o favorecer las industrias, los medios de transporte y los combustibles de uso doméstico que son menos contaminantes; también el uso cada vez más habitual de las energías limpias, gracias a que cada año invertimos más en fuentes renovables que en combustibles fósiles, resulta de gran ayuda.
Por ello se busca favorecer las iniciativas de este tipo, concebidas para mejorar la calidad del aire y luchar contra el cambio climático, en la que se busca lograr la coincidencia en los gobiernos para tomar medidas y actuar de manera contundente en pos de lograr una "economía verde" y no una "economía gris": gravar la contaminación, dejar de subvencionar los combustibles fósiles y dejar de construir nuevas centrales de carbón.
En este Día Mundial del Medio Ambiente correspondiente al año 2019, la ONU comparte diversas ideas con las que combatir la contaminación del aire, entre las que se cuentan las siguientes:
Usa transporte público o comparte coche, muévete en bicicleta o simplemente camina.
Cámbiate a un vehículo híbrido o eléctrico.
Apaga el motor del coche cuando estés detenido en el tráfico.
Reduce tu consumo de carne y productos lácteos; ayudarás a reducir las emisiones de metano que emite el ganado.
Composta alimentos orgánicos y recicla la basura no orgánica.
Cámbiate a sistemas y equipos de calefacción de alta eficiencia para el hogar.
Ahorra energía; apaga las luces y los aparatos electrónicos cuando no los estés utilizando.
Nunca quemes basura; contribuirías a aumentar la contaminación del aire.
Elige pintura no tóxica y los muebles donde se utilice.
En el año 2050 habrá alrededor de nueve mil millones de habitantes en la Tierra; para que podamos legar a nuestros hijos y nietos un mundo habitable, es necesario combatir la pobreza generalizada y la destrucción del medio ambiente, evitando así que paguemos un precio mayor, con un planeta más pobre e inestable y degradado: las emisiones de gases de efecto invernadero continúan aumentando, y más de un tercio de todas las especies conocidas podrían extinguirse si el cambio climático continúa sin control, por lo que el desarrollo sostenible debe ser un punto vital en la agenda de gobiernos y ciudadanos.
En el mensaje de António Guterres se señala que "en este Día Mundial del Medio Ambiente, tomemos todos medidas para respirar tranquilos. Desde presionar a los políticos y a las empresas hasta cambiar nuestros propios hábitos, todos podemos reducir la contaminación y ganar la partida al cambio climático". Coincidimos.