A 42 años del fallecimiento del destacado exponente del muralismo mexicano, acaecido el 6 de enero de 1974

El pasado martes 12 de enero y para rendir un homenaje al gran pintor y muralista mexicano David Alfaro Siqueiros, a 42 años de su muerte –ocurrida el 6 de enero de 1974, en la ciudad de Cuernavaca, Morelos–, se realizó una ceremonia luctuosa en la Rotonda de las Personas Ilustres del Panteón Civil de Dolores, con la asistencia de funcionarios, artistas, maestros, familiares y seguidores de este gran exponente de la plástica nacional.

“El Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) participa en esta conmemoración porque honra a un pintor que dio un nuevo rostro a nuestra plástica y al arte mexicano en el interés del mundo entero y en el legítimo diálogo con las creaciones más sobresalientes del arte moderno universal”, dijo, durante el acto, Xavier Guzmán, subdirector general del Patrimonio Artístico Inmueble del INBA, de acuerdo a un boletín de la dependencia. 

Explicó que el diario artístico y político del autor de obras como “El coronelazo” y “Muerte al invasor”, es objeto de estudio, análisis y discusiones a la luz de nuevas lecturas y enfoques propuestos por especialistas, con la participación de los jóvenes que se han acercado recientemente a su trabajo y aportan ángulos sugerentes y novedosos.

Asimismo, destacó que el homenaje luctuoso efectuado frente a la lápida del pintor, ante la  escultura Prometeo de Armando Ortega, brindó la oportunidad de reflexionar sobre su obra en ciertos momentos que caracterizaron su apasionante vida, entre los que sobresalen aquellos en los que expresó su amor por México y su solidaridad con las causas que buscaron una sociedad más justa y equitativa, dice el comunicado.

“Recordamos a Siqueiros como un creador extraordinario y uno de los pinceles más firmes de la plástica mexicana de su tiempo. Rememoramos su participación en las encendidas polémicas en torno a las artes y al papel de los artistas en la transformación del país; a un artista que forma parte de nuestra historia” destaca el boletín del Instituto.

Guzmán señaló que el INBA y quienes contribuyen a la construcción de un mejor país consideran este tipo de ceremonias una expresión sincera de reconocimiento que debemos a nuestros hombres y mujeres ilustres, “un testimonio en la trascendencia de su obra y una ocasión para acercarla a las nuevas generaciones. Hoy hemos venido aquí para agradecerle su generosa obra y proverbial entrega a México”.

Por su parte, Taiyana Pimentel, directora de la Sala de Arte Público Siqueiros y de La Tallera de Cuernavaca, ambas dependientes del INBA, afirmó que 2016 será un año de trabajo y compromiso para estos dos centros, dentro de la producción artística y de la conservación del legado de Siqueiros.

Durante la ceremonia luctuosa se llevaron a cabo guardias de honor con la participación de funcionarios, artistas, trabajadores de la Sala de Arte Público Siqueiros, maestros del Centro de Estudios Tecnológicos Industrial y de Servicios David Alfaro Siqueiros y familiares del creador, entre ellos Magdalena Zavala, coordinadora nacional de Artes Visuales del INBA; Alfredo Suárez, presidente ejecutivo del Polyforum Siqueiros, y David Constantino Rodríguez Ochoa Siqueiros, bisnieto del pintor.

El acto y las guardias de honor contaron con el acompañamiento musical de la violonchelista Natalia Pérez, quien interpretó obras de Blas Galindo, Marcela Rodríguez, Johann Sebastian Bach, Hans Werner Henze y Alfred Schnittke.