“Qué mayor rechazo para aquellos que
quisieran acabar con nuestro mundo que unir
nuestros mejores esfuerzos para salvarlo?”
-Barack Obama-
Tal vez esté equivocado, pero cuando era niño nunca supe ni escuché de incendios forestales en nuestras tierras. Sin embargo, desde hace algunos años se empezaron a propagar de manera impresionante en nuestro país.
Los incendios forestales traen pérdidas cuantiosas: vidas humanas y animales, contaminan el aire, causan la erosión del suelo, alteran el régimen hidrológico, destruyen la flora. En síntesis, trae consecuencias económicas, sociales y políticas, entre otras.
Pero, ¿cómo se inician? ¿Cuál es su origen? Específicamente en los países en desarrollo, la alta marginación orilla a muchas comunidades a destruir el bosque para cultivar la tierra o para practicar la ganadería, mermando la vegetación, que es la base de los ecosistemas terrestres. Más del 90 por ciento de los incendios forestales se debe a causas humanas.
La siguiente información fue obtenida en:
www.cdi.gob.mx/difusion/incendios/incendios.html
Quemas agrícolas: La pérdida de control y el descuido en quemas agrícolas, como no tomar en cuenta la hora de la quema y dirección del viento, no contar con brechas corta fuego, entre otros, es la principal causa de incendios.
Sequía: Las zonas afectadas por la sequía son las más propensas a incendios forestales, sobre todo si existe abundancia de combustibles naturales: ramas y hojas secas, matorrales, etc.
Vientos: La velocidad, contenido de humedad y dirección del viento es un factor clave que puede disminuir o propagar un incendio.
Clima: Las altas temperaturas son una de las condiciones más propicias para que surjan o se propaguen los incendios.
Descuido del hombre: La imprudencia de excursionistas en bosques al encender fogatas, fumar o quemar basura, sin las debidas precauciones, puede tener como consecuencia incendios de grandes proporciones.
Actividad agropecuaria: Al destruirse la vegetación, el suelo queda expuesto a la erosión por el viento y la lluvia.
Tala inmoderada: Los “talamontes” son de los grupos que más daños ocasionan a los bosques con la destrucción de los árboles y el abandono de ramas y follaje que al secarse constituyen un combustible muy peligroso.
De acuerdo al Observador Global de Incendios Forestales, se recibieron 77 mil 315 alertas en nuestro país durante la primera quincena de mayo de este 2019. De esta manera, México se ha convertido en el segundo lugar mundial en alertas por incendios forestales, sólo después de Rusia.
Parece, de verdad, que hay personas que quieren acabar con la vida en nuestro planeta.
La contaminación que surge por estos eventos reduce la calidad de vida. Respirar el humo provoca un alto riesgo de sufrir un paro cardíaco y una serie de problemas respiratorios.
¿Cómo podemos prevenirlos? Evita arrojar basura, materiales inflamables y objetos encendidos en carreteras y caminos; no tires vidrios, botellas, desperdicios o cualquier tipo de material combustible; no enciendas fogatas; si encuentras restos de fogatas, extínguelos con agua y tierra. Si ves rescoldos, apágalos hasta que dejen de humear; y por último: En terrenos forestales, pastizales y zonas rurales evita el uso de maquinaria y el tránsito de vehículos que emitan chispas.
Pero lo más importante, de acuerdo a los estudiosos de los incendios en la Amazonia, los incendios forestales tienen una relación directa con la deforestación, pues “normalmente, quienes quieren despejar un espacio de bosque, primero le quitan los árboles y, después de unos meses, lo incendian.” También el cambio climático afecta.
Pero al final, es el mismo ser humano el que principal causante del cambio climático, por tanto, el ser humano es el principal culpable de la tragedia en la Madre Tierra.
Comencemos cuidando nuestro territorio morelense, pero sin soslayar nuestro compromiso de cuidar a nuestra Madre Tierra, luchando para lograr una cultura de armonización y una cultura de la paz para el buen vivir.