Durante cada uno de los cuatro días que dura este festival, pilotos y tripulación trabajan desde muy temprano para inflar los globos y lograr ponerlos en el aire cada mañana. Así, mientras a nivel del suelo la gente puede disfrutar de comida, música y cerveza, en lo alto puede admirar los 200 globos que llenan de color el paisaje. Se trata de los espectáculos más bellos y admirados de México: el vuelo en pleno de fascinantes y coloridos globos aerostáticos.
Se calcula que este año el Festival Internacional del Globo reciba casi medio millón de asistentes. Lamentablemente, si alguno de nosotros aún quería salir corriendo a León y ser parte de la tripulación de alguno de los 200 globos, ya no es posible pues el cupo se ha llenado. Sin embargo, haberlo intentado me dio la oportunidad de conocer el procedimiento y ahora sí, apuntarlo para el año siguiente estar mucho más atenta.
Cualquiera puede ir al festival y por 65 pesos ingresar al Parque Metropolitano, disfrutar los espectáculos de danza y música programados pero no todos pueden subir a los globos. Quienes lo han logrado no han tenido que pagar por ello, pero sí debieron llenar un formulario de registro en línea con mucho tiempo de antelación y cubrir algunos requisitos.
El primero es reunir un equipo de tres personas, de las cuales sólo una puede ser mujer. Confieso que al leer esto mi vena feminista saltó en la frente mientras fruncía el ceño. Sin embargo después me explicaron que esto es porque los tripulantes en realidad se vuelven parte activa del proceso de elevación de los globos, algo que no sólo no es cosa fácil, sino que también involucra un considerable esfuerzo físico.
Otro de los requisitos, y que por cierto yo no cumplo, es tener una camioneta pick-up por equipo. Esto es porque, si bien ninguno de los tripulantes paga por hacer esto, lo cierto es que contribuyendo con sus propios vehículos para transportar los globos al lugar del inflado y el despegue, los tripulantes prácticamente son inversionistas del festival pues ¿se imaginan cuanto costaría rentar 200 camionetas pick-up durante 4 días para poder realizar esta labor?
Los globos son dirigidos por excelentes pilotos reconocidos a nivel mundial, que se dan cita en el Parque Metropolitano de León de 337 hectáreas, donde año con año desde el 2001 ha ido en aumento la cantidad de globos participantes de 27 a 40, 60, 80, 90, 100 hasta llegar a los más de 200, haciéndolo el más importante en Latinoamérica.
Justo por ello, otro de los requisitos para ser tripulante es hablar un perfecto inglés. Esto porque los tripulantes deben comunicarse con los pilotos para mantener el globo en el cielo durante todo el tiempo que estén allí. Es un tema de seguridad, así que decir que hablas inglés si no es así, puede causar graves problemas.
Y aunque ser tripulante seguramente es emocionante pues te hace sentir creador de un espectáculo fuera de serie, convertirte en parte de un mosaico multicolor que cubre el cielo leonés, lo cierto es que debe ser bastante cansado. Pero el Festival de Globo se ve enriquecido con las múltiples actividades durante todo el día que se organizan como conciertos, concursos, exhibiciones y una zona de gastronómica para toda la familia. Participantes vienen hasta León desde Alemania, España, Estados Unidos, Bélgica, Brasil, Argentina, Venezuela, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Canada y México ente otros países.
Gracias a este festival, León se ha vuelto famosa como “La ciudad de los globos” pero este no es el único festival. El pasado mes de abril se llevó a cabo Festival de Globos Aerostáticos de Xochitla, un campamento ubicado apenas a 45 minutos de la Ciudad de México, en el poblado de Tepotzotlán.
Lo cierto es que en ese evento se elevan mucho menos globos, la entrada es mucho más cara y no tiene la magia ni la fama del festival guanajuatense, sin embargo aquí sí se pueden comprar también vuelos en globo y no sólo admirarlos desde tierra.
Pero dependerá mucho de lo que cada uno quiera hacer. Si lo que a usted le gusta es admirar la belleza y colorido de los globos llenando el paisaje, al mismo tiempo que disfruta de espectáculos culturales con su familia y se da gusto en las muestras gastronómicas, sin duda el festival de León es lo suyo.
Si lo que busca es volar en un globo aerostático, no es necesario esperar a que ocurra un festival pues cada vez hay más opciones para quienes desean vivir esa experiencia. Teotihuacán, Querétaro o San Miguel de Allende son lugares que ofrecen excelentes opciones para quienes quieren volar en globo, algunos incluso con paquetes de hospedaje y alimentación. Lo único cierto es que cada vez hay más personas convencidas de que la vida se construye de experiencias y que, sin duda, conquistar el cielo ha sido una de las más anheladas en la historia de la humanidad, y si se puede hacer en medio de una explosión colectiva de color, ¿pues mejor, no creen?