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Morelos y la Alianza México-Canadá 2020
La entidad tiene la oportunidad de sumarse al entorno de la relación bilateral México-Canadá para atraer las inversiones que requiere.
El Proyecto Minero Esperanza, de la empresa Esperanza Silver de México, tiene previsto realizar una inversión estimada en 450 millones de dólares en la comunidad de Tetlama, del municipio de Temixco.
El jueves 26 de noviembre los gobiernos de México y Canadá sostuvieron un encuentro virtual con representantes del más alto nivel. Esto, en el marco de la Alianza México-Canadá el cual es un mecanismo clave en materia de cooperación bilateral que permite catalizar la acción coordinada de ambos gobiernos para alcanzar objetivos comunes.
Este instrumento que se constituyó en el año 2004, se encuentra integrado por ocho grupos temáticos de trabajo: agroindustria; cultura y creatividad; energía; medioambiente; bosques; capital humano; minería; y en comercio, inversión e innovación. En cada uno de estos grupos existe una representación de actores gubernamentales del más alto rango de cada sector y también de representantes del sector privado.
En la realización de los trabajos de la Alianza México-Canadá en esta ocasión México fungió como sede del encuentro, estando a la cabeza de los trabajos el Canciller Marcelo Ebrard y por parte del gobierno canadiense estuvo al frente el embajador Graeme C. Clark.
En este marco, el gobierno de Morelos recibió la invitación para asistir de manera virtual a la 16ª reunión de la Alianza México-Canadá, de tal manera que Rubén Lugo, Director General de Macroeconomía y Fomento a la Exportación de la Secretaría de Desarrollo Económico y del Trabajo estuvo presente en el encuentro.
En materia económica, Canadá representa para México el tercer inversionista más importante en el eje de la Inversión Extranjera Directa (IDE), en lo cual en el periodo 1999-2019, la IDE de Canadá en México ascendió a 40,311 millones de dólares.
De este total, el 39.7% de la Inversión Directa se enfocó en la minería, y de este porcentaje el 98.7 de las inversiones canadienses en minería se reflejaron en la minería de minerales metálicos y no metálicos, excepto petróleo y gas. Esto con información proporcionada por la Secretaría de Economía del Gobierno de México.
En este contexto de inversión económica, los estados de Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Guerrero, San Luis Potosí, Sonora, Zacatecas, son los principales estados receptores de las inversiones en minería por parte de Canadá.
Ante la actual situación de crisis económica que nos encontramos enfrentando derivado de la pandemia del Covid-19, resulta de suma importancia que el gobierno federal haya considerado invitar al gobierno de Morelos al encuentro de la Alianza México-Canadá, esto cobra una particular relevancia debido a que se encuentra en puerta que Morelos sea receptor de una fuerte inversión por parte de la empresa Esperanza Silver de México subsidiaria de la empresa canadiense Alamos Gold.
De esta manera, el gobierno de Morelos, dentro de su propio ámbito de competencias se convierte en un actor comprometido en atraer al estado las inversiones que se requieren para lograr la reactivación económica y el fomento al empleo.
En términos concretos, el Proyecto minero Esperanza, de la empresa Esperanza Silver de México, tiene previsto realizar una inversión estimada en 450 millones de dólares en la comunidad de Tetlama del municipio de Temixco, según el plan de negocios de este proyecto, el total de la inversión se desplegará en un lapso de 10 años que equivale al tiempo de vida del proyecto.
Esta millonaria inversión va acompañada de la generación de 1,500 empleos directos y 6,000 empleos indirectos, aunados al establecimiento de una red de proveedores locales.
Hay que mencionar, que una inversión de esta magnitud tiene la capacidad de detonar una derrama económica a favor de los negocios y familias en la región en donde se va a establecer la mina oro y plata de Esperanza Silver de México.
En el escenario de crisis económica en el que nos encontramos, Morelos tiene la oportunidad de sumarse al entorno de la relación bilateral México-Canadá para atraer las inversiones que tanto requiere nuestro estado.
La inversión en el proyecto minero repercutirá en economía de toda la entidad
Comunidades indígenas de Temixco, como Tetlama, registran elevados niveles de marginación.
Administraciones municipales van y vienen y en el municipio de Temixco continúan registrándose altos índices de marginación y de pobreza, principalmente en las comunidades indígenas de Cuentepec y San Agustín Tetlama, cuya población está sumergida en la pobreza y el rezago social.
No obstante hay posibilidades de que Tetlama y las comunidades aledañas a ese lugar, pertenecientes incluso a otros municipios, salgan de los índices de extrema pobreza y se conviertan en lugares con servicios públicos adecuados, empleos y desarrollo educativo y de salud.
Lo anterior, ante el avance que se sabe existe para la puesta en marcha del proyecto minero Esperanza Silver de México, que es impulsado por el corporativo canadiense Alamos Gold.
En dicho proyecto se pretenden invertir más de 400 millones de dólares y ha sido socializado entre los habitantes de Tetlama, quienes han externado su interés no sólo porque la apertura de la mina les generará fuentes de empleo, sino porque también representará desarrollo y bienestar para su comunidad.
Así que para los habitantes de Tetlama no todo está perdido, porque tienen la única oportunidad de que las inversiones lleguen y a su vez el cambio en la situación social y económica de dicha comunidad en lo particular, pero de Temixco y Morelos en lo general, porque no sólo la población local se verá beneficiada, sino que además se pretende la contratación de proveedores morelenses, lo cual sin duda impulsará la economía estatal.
La empresa Esperanza Silver de México garantiza que en la comunidad de San Agustín Tetlama será implementado un nuevo Modelo de Minería Social y Ambientalmente Responsable y se cumplirá al 100 por ciento con las normas mexicanas e internacionales.
Como parte del compromiso social que la empresa Esperanza Silver tiene con la comunidad de Tetlama garantizarán la participación ciudadana a través de la figura de testigo social, a fin de que representantes e instituciones de la mayor credibilidad y honorabilidad, participen de manera directa en el desarrollo del proyecto, en el que se tiene prevista la generación de más de seis mil empleos directos e indirectos.
El proyecto Esperanza continúa en su fase de estudios de factibilidad para contar e integrar toda la información técnica necesaria para solicitar en su momento el Manifiesto de Impacto Ambiental ante la autoridad federal, lo cual permitirá en su caso el inicio formal de operaciones de la mina Esperanza.
Minería en Tetlama: ¿sustentable?
La minería es una de las actividades más reguladas en nuestro país. Además de nuestra Carta Magna federal, la constitución del estado donde operarán y las disposiciones municipales, las empresas mineras deben cumplir cabalmente con las más de mil 275 leyes, normas, ordenamientos y tratados internacionales a los que México se ha adscrito, así como los requerimientos y condicionantes que la propia autoridad ambiental federal define en los Manifiestos de Impacto Ambiental (MIA).
De acuerdo al artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos “Corresponde a la Nación el dominio directo de todos los recursos naturales de la plataforma continental…; de todos los minerales o substancias que en vetas, mantos, masas o yacimientos, constituyan depósitos cuya naturaleza sea distinta de los componentes de los terrenos, tales como los minerales de los que se extraigan metales y metaloides utilizados en la industria”.
Agrega que “el dominio de la Nación es inalienable e imprescriptible y la explotación, el uso o el aprovechamiento de los recursos de que se trata, por los particulares o por sociedades constituidas conforme a las leyes mexicanas, no podrá realizarse sino mediante concesiones, otorgadas por el Ejecutivo Federal, de acuerdo con las reglas y condiciones que establezcan las leyes”.
Precisamente, una de las leyes reglamentarias de este artículo 27 constitucional es la Ley Minera, que refiere en su apartado IV del artículo 27 que “los titulares de concesiones mineras, independientemente de la fecha de su otorgamiento, están obligados a… sujetarse a las disposiciones generales y a las normas oficiales mexicanas aplicables a la industria minero-metalúrgica en materia de seguridad en las minas y de equilibrio ecológico y protección al ambiente”.
Por ello, la secretaría de Economía del gobierno federal, en voz del entonces subsecretario de Minería, Francisco José Quiroga Fernández, informó que el gobierno federal está a favor de la actividad minera siempre y cuando sea segura, tanto para los trabajadores como para las comunidades; que el proyecto sea ambientalmente sostenible, esto es, que dejen el medio ambiente mejor de como se encontró; que sea socialmente incluyente, que se desarrollen las comunidades; que no haya encono ni se generen enfrentamientos en la comunidad, y que se paguen impuestos.
Es necesario tener en cuenta que la Constitución federal, con este dominio original de la Nación sobre los recursos del subsuelo que dicta, fue promulgada en el año de 1917, esto es, hace 103 años. La Ley Minera fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el 26 de junio de 1992 y su reglamento apenas el 12 de octubre del 2012. Así que esta obligación hacia el sector minero de sujetarse a las disposiciones y normas de seguridad y equilibrio ecológico y protección al ambiente, son muy recientes aunque cada vez más estrictas.
De acuerdo a la Cámara Minera de México (Camimex), fundada en el año de 1906 y que agrupa a los principales grupos mineros de México, en el año 2018 sus afiliados invirtieron 2 mil 914 millones de pesos en programas ambientales, mientras que en el 2019, esta cifra se elevó a una inversión estimada de 3 mil 380 millones de pesos. *
La misma Camimex refiere que 111 empresas mineras participan en el programa de industria limpia que impulsa la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA); y que 5 empresas se distinguieron en Excelencia Ambiental y 3 grupos mineros forman parte del Índice Verde de la Bolsa Mexicana de Valores. **
Respecto al proyecto minero Esperanza que busca iniciar labores de extracción en los cerros del Jumil y Colotepec, aledaños a la comunidad de Tetlama en el municipio de Temixco, la postura del gobierno federal ha sido clara: La mina se avecina en Morelos, siempre y cuando se cumpla con lo que promueve el gobierno que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, que es una actividad minera responsable y que sea viable económica, social y ambientalmente, refirió en su momento, el subsecretario Quiroga Fernández.
* https://camimex.org.mx/files/4315/6398/0924/Fboletin072419.pdf
** Idem
La Nueva Minería Mexicana promueve el desarrollo y la inclusión de las comunidades: Francisco Quiroga
Morelos, en la antesala de incursionar en la minería de plata y oro.
Para reactivar la economía de Morelos, el Proyecto Esperanza podría detonar mil 500 empleos directos y seis mil empleos indirectos.
En días recientes, Francisco Quiroga, subsecretario de minería, de la Secretaría de Economía del Gobierno Federal, ofreció una serie de entrevistas a distintos medios de comunicación del estado de Morelos.
En un hecho inédito en nuestro estado, un integrante del gabinete que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, destinó una parte del tiempo de su agenda de trabajo para conversar con periodistas cuyo principal trabajo es el de informar a la sociedad sobre los temas más relevantes.
Las entrevistas que ofreció Francisco Quiroga, quien es el máximo responsable de la política minera del gobierno federal, versaron sobre la importancia de la minería en el mundo actual, la relevancia de la minería mexicana a nivel internacional, las políticas públicas en minería que se encuentra promoviendo el gobierno de México en todos los estados y municipios del país, y sobre la invaluable oportunidad que tiene Morelos de sumarse al desarrollo minero nacional mediante el Proyecto minero Esperanza que promueve la empresa Esperanza Silver de México.
Debido a la trascendía de estas conversaciones, es importante que los morelenses y los responsables de las políticas públicas a nivel estatal y municipal en Morelos, logremos apreciar en una amplia magnitud los mensajes más relevantes que el subsecretario de minería se encuentra difundiendo en tierras morelenses, los cuales podemos sintetizar en la visión de que la minería representa una ventana para la reactivación económica que tanto necesitamos como sociedad.
En el primer tema que abordó en las entrevistas, Francisco Quiroga destacó que la minería representa el gran eslabón para la consolidación de las megatendencias de la transición energética y la electromovilidad, en este aspecto, mencionó que estas megatendencias van a requerir de una mayor cantidad de minerales para lograr concretarse, como lo son el litio, cadmio, níquel, acero, plata, cobre, zinc; minerales necesarios para las baterías, la construcción de paneles solares, cables, la torres, los aerogeneradores.
Aunado a lo anterior, sabemos que los materiales que proporciona la minería, tanto de metales y minerales, son esenciales para el fruncimiento de casi la totalidad de los actuales sistemas de producción y en todos los sectores de consumo.
Otro aspecto en donde la minería tiene una muy importante presencia es en la producción de medicamentos, de insumos y materiales para infraestructura médica. Que ante el problema de la pandemia del Covid-19 que nos encontramos enfrentado a nivel planetario, la minería se convierte en una actividad de urgente necesidad que proporciona los insumos para la atención médica y la investigación en el desarrollo de los posibles tratamientos y vacunas.
Como podemos apreciar, la minería a nivel mundial suministra las materias primas para satisfacer las principales necesidades de la sociedad. En tecnología, comunicaciones, construcción, transportes, energía, productos agroquímicos, industria automotriz, salud, y todos estos sectores y otros más, resultan fundamentales los minerales y metales que aportan la minería.
Hay que decirlo con toda claridad, sin los aportes de la minería sería imposible sostener el actual nivel de bienestar que nos proporciona el acceder a todos los productos que tienen un origen en los recursos mineros.
En el tema sobre la relevancia de la minería mexicana a nivel internacional, Francisco Quiroga, subsecretario de minería, destacó que México es una potencia mundial en la producción minera, tanto en la cantidad de producción y en la forma como lo produce, haciendo énfasis de que en México se aplican las mejores prácticas mineras del mundo.
Hay que mencionar, que este tema se encuentra estrechamente relacionado con las políticas públicas en minería que el gobierno se encuentra promoviendo, en donde parten de un diagnóstico económico en el que la minería aporta el 4% del PIB y del 8% del PIB industrial, genera 379,000 empleos directos bien remunerados, y aporta casi 2 millones de empleos indirectos. También existe un Fondo Minero integrado por 25 estados mineros, este fondo permite transferir recursos económicos para el desarrollo social de las comunidades que se encuentran vinculadas con proyectos mineros.
A partir de estos indicadores económicos, el gobierno federal ha establecido una política pública en minería denominada “Nueva Minería Mexicana”, esta política pública se sustenta en la necesidad de incorporar en las acciones de los actores que forman parte de la actividad minera; gobiernos, empresas y comunidades huéspedes, los aspectos de una minería para el desarrollo sostenible, con inclusión social, y apegada al estado de derecho.
No escapa al analista de políticas públicas, que con estos elementos el primer gobierno de izquierda en México se encuentra orientando la actividad minera en establecer los mecanismos que permitan beneficiar el desarrollo ambiental y social de las comunidades.
Dejando en claro las bases que deben de orientar la actividad minera en los municipios y en los estados.
En cuanto al Proyecto minero Esperanza, de la empresa Esperanza Silver de México, subsidiaria de Alamos Gold, Francisco Quiroga, subsecretario de minería, mencionó a modo de referencia, que él conoce personalmente las instalaciones de Minas de Oro Nacional que forman parte de Alamos Gold, asentada en el estado de Sonora, y destacó que esta mina tiene una de las mejores prácticas mineras.
El subsecretario de minería también señaló que el Proyecto Esperanza tiene previsto realizar una inversión de 450 millones en el estado de Morelos para construir una mina de mediano tamaño, tiene el potencial de generar 1,500 empleos directos y 6,000 empleos indirectos, además de requerir de contrataciones locales tanto de proveedores y mano de obra necesaria en la construcción de la mina.
En un contexto en donde la minería ha demostrado su fortaleza en la reactivación económica de México, Morelos tiene la posibilidad de acceder a los beneficios que conlleva la actividad minera. Esta es una actividad regulada por una amplio y robustecido marco legal, aunado a las políticas públicas de la Nueva Minería Mexicana del gobierno federal que Francisco Quiroga explicó. Políticas públicas creadas por el primer gobierno de izquierda en México, las cuales los gobiernos estatales y municipales tienen la obligación de promover.
En el caso de Morelos, ya no hay excusa que valga en el tema, el mensaje de Francisco Quiroga, máximo responsable de gobierno federal en el tema de minería, es una genuina cátedra de políticas públicas, que obliga a los responsables de las dependencias estatales y del municipio de Temixco a incorporar en sus acciones gubernamentales. El no hacerlo, implicaría negarle a los morelenses la oportunidad de acceder a empleos formales y bien remunerados, lo que representaría una verdadera traición al pueblo de Morelos que se encuentra a la espera de resultados de gobierno que favorezcan a la gente.
La minería busca compaginarse con el desarrollo sostenible
El proyecto de la comunidad de Tetlama se enmarca en ese objetivo.
El pasado mes de julio los empresarios mineros del país revisaron a fondo las condiciones actuales que tiene una de las industrias más importantes de México.
Desde sus orígenes, aún en la época colonial, México ha desarrollado una cultura de la minería muy basta y amplia. Prácticamente en todo el país se pueden encontrar minerales tan indispensables para la industria a nivel mundial como el litio, el cobre, el zinc, así como la plata y el oro. Recordemos que esta actividad económica genera casi el cuatro por ciento del PIB nacional anualmente y brinda empleos directos e indirectos a millones de mexicanos.
Pero si hay algo que no se debe olvidar, es que desde hace 20 años la industria minera a nivel mundial ha buscado compaginarse con la protección ambiental y los desarrollos sustentables, con la finalidad de que no sólo se trate de una actividad netamente económica y de explotación de recursos naturales no renovables, sino que se le pueda entender como una actividad necesaria para el funcionamiento de la industria en su conjunto.
Prácticamente todo tipo de producto transformado necesita de las materias primas que se obtienen por medio de la actividad minera.
Así como hace años se hablaba de los componentes de máquinas y equipos tecnológicos que nos llevaran a un desarrollo industrial y económico rumbo al Siglo XXI, hoy día las necesidades están más enfocadas en que la producción industrial sea amigable con el medio ambiente, que se tenga compromiso social y ecológico.
Los industriales mineros, sabedores de esos requerimientos, impulsan la generación de energía más sostenible y limpia, por ello la minería sigue siendo la base fundamental para la fabricación de celdas solares, de generadores eólicos, y de mejores y más eficientes conductores de energía.
La minería es una de las principales actividades productivas de México (es el tercer generador de riqueza a nivel nacional) y las empresas saben que se deben impulsar industrias limpias, sustentables y con visión de futuro, no sólo para sus intereses, sino con las comunidades donde se asientan, con las familias de sus trabajadores, con el desarrollo económico local, como lo impulsa la empresa Esperanza Silver en la comunidad de Tetlama, municipio de Temixco.
Estos retos se pueden enfrentar de forma muy eficiente y con los mejores niveles de calidad. No debemos dejar de señalar que las explotaciones mineras no sólo otorgan trabajos directos, también se generan miles de empleos indirectos y se impulsa el desarrollo económico de las localidades.
Tendencias actuales de la minería en México y América Latina
En la actualidad la industria minera se encuentra trabajando en México y América Latina en el rediseño de sus procesos de producción esto como parte de una transición que incorpore en su operación los aspectos medioambientales y sociales. Esta transición de la industria minera se debe al reconocimiento de impulsar nuevas prácticas que respondan a las demandas de la sociedad en su exigencia de poner fin a las externalidades negativas que en distintos lugares provocaron proyectos mineros que no tomaron en cuenta las afectaciones al entorno que ocasionaron sus actividades.
En el impulso de esta transición se aprecia la intervención de factores internos, correspondientes a la acción política de los actores dentro de un territorio nacional, y factores internacionales; ambos factores propiciaron las condiciones necesarias para que la minería se encuentre incorporando prácticas que en el pasado hubiera sido impensable que las tomaran en cuenta.
En el marco internacional sobresalen los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU, la cual fue aprobada por 193 Estados Miembros de la ONU en septiembre del 2015. Esta Agenda establece un plan de acción de carácter mundial a favor de la inclusión social, la sostenibilidad ambiental y el desarrollo económico.
La Agenda 2030 se integra con 17 Objetivos y 169 metas, y rige los programas de desarrollo mundiales hasta el 2030. Para cumplir con los Objetivos que establece la Agenda 2030, es necesaria la activa participación de los actores gubernamentales, de la sociedad civil, de las comunidades y del sector privado.
Y por supuesto, la industria minera también está convocada a participar en este esfuerzo de transformación de la sociedad.
A partir de este contexto internacional se aprecian las siguientes tendencias en cuanto a la relación de la minería con la sociedad, las comunidades, los gobiernos y la economía.
1) Un importante segmento del sector de la minería se encuentra adaptando sus procesos y operaciones con miras de contribuir al cumplimiento de los Objetivos de la Agenda 2030, estableciendo estrategias para una minería del desarrollo sostenible.
Al respecto, el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM por sus siglas en inglés), sostiene como parte de sus Principios empresariales el compromiso con prácticas comerciales éticas que apoyen el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y el Acuerdo de París sobre el cambio climático. (https://www.icmm.com/es/miembros-del-icmm/principios-mineros)
2) En el ámbito de las políticas públicas en América Latina, los gobiernos progresistas de la región establecieron una serie de normas y acuerdos para orientar la actividad de la industria minera en clave para el desarrollo sostenible. Este proceso de reconversión de la minería se inició y desarrolló en la primera década del siglo XX. Definiendo nuevas reglas de colaboración para proteger el medioambiente y propiciar el desarrollo de las comunidades. Estas reglas también abarcan la captación de ingresos fiscales y pagos de derechos, con estos ingresos los gobiernos progresistas financian una considerable parte de los programas sociales. En el contexto de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha confirmado su interés a favor de la minería para el desarrollo sostenible y en distintas ocasiones ha hecho énfasis en los aportes de la minería a la sociedad. Lo que confirma esta tendencia de los gobiernos progresistas y la minería en América Latina.
3) En el marco de la pandemia de Covid-19 y la crisis económica; la minería ha sido revalorada por los gobiernos de todo el mundo como una industria esencial por su aporte de minerales, metálicos y no metálicos, indispensables para la producción de medicamentos y de insumos médicos. La minería también aporta la materia prima para la construcción de infraestructura, equipo tecnológico, de comunicaciones, y facilita los recursos minerales para la fabricación de todo tipo de transportes. Sin la minería sería imposible contar con las tecnologías que se usan en el sector salud. Hay que mencionar que en días recientes la minería fue catalogada por el gobierno de México como una actividad esencial lo que confirma en el plano local la tendencia a revalorar de manera positiva los aportes que genera esta industria.
4) La incorporación del relacionamiento en los proyectos mineros es una tendencia que cada día cobra más fuerza en México y América Latina. El relacionamiento permite tender puentes de diálogo, compartir información, propiciar la colaboración y generar confianza entre las empresas mineras, las comunidades y los gobiernos. De esta manera es posible definir acuerdos de colaboración que contribuyan al desarrollo sostenible.
5) México, Brasil, Chile y Perú, concentran el 85% del comercio de minerales y metales que exporta la región (CEPAL 2018), en el marco de la reactivación económica postCovid-19 esto representa una fortaleza en términos de contar con recursos mineros que permitan generar ingresos a los gobiernos y de esta manera robustecer la cobertura de los programas sociales y dispersar recursos a las comunidades que más lo necesitan. Al correlacionar esta fortaleza con el pujante desarrollo de cambio tecnológico que se está viviendo a nivel planetario a la par de la necesidad de abastecer de materia prima a la creciente industria de energías limpias, esto genera en el mercado internacional una tendencia en el aumento de la demanda de recursos minerales generando en la industria minera una expectativa para el desarrollo económico.
Estas tendencias configuran el perfil de un amplio segmento de proyectos mineros que han renovado sus procesos con miras a una minería para el desarrollo sostenible. Tal es el caso del Proyecto minero Esperanza que busca establecer una mina de oro y plata en una parte de los terrenos comunales de la comunidad de Tetlama ubicada en el municipio de Temixco en el estado de Morelos. Este proyecto incorpora el enfoque del desarrollo sostenible, priorizando el diálogo con la comunidad, trabajando con un estricto apego a las normas internacionales, nacionales y estatales. Con estás características, se aprecia que el Proyecto Esperanza cuenta con los elementos constitutivos que lo definen como un Nuevo Modelo de Minería.
Ante las consecuencias económicas y sociales que nos encontramos enfrentando debido a los efectos de la pandemia del Covid-19, es necesario que como gobierno y sociedad revaloremos el Proyecto Esperanza en su capacidad de detonar un polo de desarrollo económico en Morelos que contribuya a la generación de empleo, al fortalecimiento de la economía local mediante instauración de una red de proveedores. Todo esto en beneficio de los morelenses. Sin lugar a duda, el Proyecto Esperanza representa la oportunidad de convertirse en factor relevante para la reactivación económica de Morelos. En nuestras manos se encuentra la posibilidad de que esto sea una realidad.
Minería, actividad esencial: CSG
Podrá volver a operar; genera el 8.2 del PIB industrial; Esperanza Silver de México proyecta una inversión de 450 millones de dólares en la zona de Tetlama.
El Consejo de Salubridad General (CSG) aprobó incluir como actividades esenciales la construcción, la minería y la fabricación de equipo de transporte, por lo cual podrán volver a operar. La industria minera representa el 8.2 por ciento del PIB Industrial y es la sexta generadora de divisas para el país.
El organismo indicó que todas las empresas y establecimientos que se reabran aplicarán las medidas sanitarias de manera obligatoria en el entorno laboral, las cuales serán emitidas por la Secretaría de Salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
Y es que, frente al escenario de crisis económicas que vive el planeta y que afecta a México por igual, las actividades económicas, como la minería, se convierten en fundamentales para la recuperación. México ocupa en esta materia el primer lugar mundial en la producción de plata.
Además, se ubica entre los 10 principales productores de 16 diferentes minerales. Según la Secretaría de Economía del gobierno federal, estos minerales son: plata, bismuto, fluorita, celestita, wollastonita, cadmio, molibdeno, plomo, zinc, diatomita, sal, barita, grafito, yeso, oro y cobre.
También es el primer destino en inversión en exploración minera en América Latina y el cuarto en el mundo de acuerdo con el reporte publicado por SNL Metals & Minning 2015. Es el quinto país con el mejor ambiente para hacer negocios mineros, de acuerdo al reporte de la consultora Behre Dolbear publicado en agosto de 2015.
En México, contribuye con el 4 por ciento del Producto Interno Bruto nacional. Al mes de julio de 2015, generó 352 mil 666 empleos directos y más de 1.6 millones de empleos indirectos, de acuerdo con el reporte del Instituto Mexicano del Seguro Social. Por eso es que se considera como una actividad esencial para este momento de la pandemia.
LA MINERÍA EN MORELOS
Morelos sigue siendo una de las entidades con problemas por el coronavirus, pero también con enormes problemas de pobreza y marginación. Tetlama, una comunidad en el municipio de Temixco, en la zona metropolitana de Cuernavaca, tiene indicadores de marginación importantes.
Según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), el analfabetismo en la zona de Tetlama supera el 12 por ciento y únicamente el 34 por ciento de la población tiene la primaria completa. Además, el Inegi también reporta que el 21 por ciento de las viviendas de Tetlama tiene piso de tierra, y en el 2.4 por ciento de las mismas no hay agua entubada. Son casi dos mil habitantes que vivían de un basurero que cerró en 2006 y, por esa razón, las fuentes de empleo son escasas, y la marginación se profundizó.
La opción más importante es la explotación de una veta registrada en la zona, para lo cual la empresa Esperanza Silver de México ya cuenta con la concesión y los permisos necesarios, además de un proyecto que se conoce como “Nuevo Modelo de Minería Social y Ambientalmente Responsable”, que promueve el desarrollo comunitario sustentable, con tres ejes: derechos humanos, tejido social y protección ambiental.
La subsidiaria de la empresa Alamos Gold Inc, tiene proyectada una inversión estimada en 450 millones de dólares en la zona, lo que permitirá además de dar empleos directos a personas de todas las comunidades aledañas, además de una serie de oportunidades aledañas que irán surgiendo en el transcurso de la operación de la minera en la zona. La inversión tendrá un impacto los próximos 10 años, lo que convertirá a la zona en un polo de desarrollo económico, que atraerá otras inversiones.
Una de las quejas que se tienen en contra de las inversiones mineras es que las zonas después de la intervención no se pueden utilizar al finalizar. Sin embargo, el proyecto de Esperanza Silver de México, se propone la construcción de un parque turístico temático que sea administrado directamente por las personas de la comunidad, lo que les daría una opción para la continuidad económica.
Ante la actual situación, el Proyecto Esperanza es esencial para la reactivación económica del estado por los empleos directos e indirectos que se generarán, las cadenas de valor y proveeduría que se activarán y por la generación de impuestos que impactarán favorablemente a las finanzas públicas estatales y municipales.
La opción para Morelos es la explotación minera como una forma de salir del problema económico. Al final, las comunidades cada vez tienen un mayor consenso para llevar adelante el proyecto, al conocer los beneficios que tendrán y particularmente, en el contexto de la pandemia del Covid-19.