El asunto se trabajó muy sigilosamente, porque se decía que no le avisaron ni al presidente municipal Miguel Ángel Colín Nava (a quien agarraron fuera de lugar, parece que andaba por Guanajuato o a lo mejor en Puebla, donde se asegura, viene construyendo una lujosa clínica), por lo visto, fue el primer sorprendido.
Lo anterior tiene que ser producto de una investigación, sólo así se justifica que dejaran a este territorio sin vigilancia, porque se menciona que fue todo el turno completo y se desconoce a dónde se los llevaron y todo indica que les dieron “una sopa de su propio chocolate”, porque los trataron ya como lo que parece son, unos delincuentes, los subieron en camiones de redila y jalaron con rumbo desconocido.
Ya se había dicho algo respecto a unos 150 elementos de diversos municipios el lunes pasado, en el clásico monólogo de inicio de semana, en lo que llegó a ser la rueda de prensa, así que esta misma acción pudiera aplicarse en otros territorios, quizás sea la única manera de ir resolviendo el penoso asunto de complicidades, porque simplemente no vemos avance alguno del ya muy desgastado Mando Único. Las ejecuciones continúan, también los levantones y extorsiones, la única diferencia, es que ya no se dan a conocer a los medios, hay un férreo control informativo de parte de la Comisión de Seguridad Pública estatal.
Platicamos con algunos regidores del ayuntamiento en referencia y consideraron que independientemente de que se pudiera tratar de un aspecto meramente de seguridad, también es posible que tenga algunas implicaciones de carácter político, porque recordaron que el edil no comulga con la corriente partidista de la mayoría de quienes gobiernan el estado.
Para acabar pronto, los cercanos al alcalde sienten que se trató de un golpe con distintas connotaciones y hasta ayer, ya entrada la tarde, nadie les había informado cuál era el propósito de la retención de elementos y acaso que los estaban investigando. Incluso persistía el temor de que hoy miércoles, muchos de los policías que entran en el siguiente turno pudieron no haber llegado, por temor a que les pase lo mismo.
La cosa es que todavía el lunes el secretario de Gobierno Messeguer presumía de un reconocimiento federal al estado por ser una de las entidades con el más alto índice de exámenes de confianza practicados, pero si esos son los resultados de los mismos, entonces para qué de dichas pruebas.
EN EL CASO DE EXÁMENES ¿Y MESSEGUER Y CAPELLA?
Y por ciento, hablando de exámenes de confianza, se debe tener en cuenta que Messeguer es el comisionado de seguridad, tiene la representación estatal ante el Sistema Nacional de Seguridad y se afirma que no se lo ha hecho, lo mismo ocurre con Jesús Alberto Capella Ibarra y hay que recordar que “el buen juez por su casa empieza”, así que si quieren presumir de transparencia en esa materia, lo menos que deben hacer es presentarnos los resultados de sus respectivas pruebas, de lo contrario acaban siendo “candiles de la calle y oscuridad de la casa”.
En lo que se refiere a Capella, los datos que nos han llegado, señalan que el último examen de confianza que se hizo fue cuando era jefe policiaco en Tijuana, Baja California, pero como dijera aquel añejo comercial “esa es ya otra historia”, aquí debe presentar los resultados actualizados para poder pregonar con el ejemplo.
Igualmente se agrega que buena parte de los mandos que ha venido colocando en las estructuras del Mando Único, los está trayendo de Tijuana. También sería bueno que los presentara para saber de quiénes se trata, ya que de todos ellos se hablan barbaridades y deseamos pensar que no es cierto, por eso necesitamos identificarlos.
Pero eso de que ni Messeguer ni el jefe policiaco han pasado los exámenes es realmente inquietante, de acuerdo a lo que ellos mismos han dicho, se trata de un requisito infranqueable para poder asumir la responsabilidad que ostentan, pero sobre todo, sólo así tendrán calidad moral para demandar de sus subalternos lo mismo.
Por cierto, también se señaló que con el control de las corporaciones de tránsito y vialidad de parte del Mano Único, las recaudaciones por infracciones se han incrementado hasta en un 30 por ciento, particularmente en Cuernavaca, pero en la calle se multiplican las quejas ciudadanas, se acusa a los agentes de estar extorsionando a todo mundo, que las “mordidas” son ya mayores, como si tuvieran la encomienda de recaudar ciertas cantidades para quedar bien con sus jefes, pero de eso no se dijo nada el lunes pasado.
Tras lo ocurrido en Temixco, se considera pues que habrá mano más dura en la batalla por la limpieza de los cuerpos policiacos, se extreman medidas, como ya ha ocurrido en otras entidades de la república, no obstante, es imperante que en lo referente a los exámenes de confianza los jefes policiacos den el primer paso, de otra manera adolecen de calidad moral para hablar al respecto y en ese sentido Capella y Messeguer están obligados a hacer lo propio. ¿Por qué no lo han hecho, acaso consideran que saldrán reprobados?, porque hasta donde sabemos, ahí no valen palancas, y habría que ver si no lo pasan, ¿estaría en riesgo el cargo?, igual y sí, por eso le dan tanta vuelta al asunto.