El pasado sábado arribó el presidente de la República a “Las Estacas”. Ahí pernoctó y en la mañana desayunó con Margarita González Saravia, una de las propietarias del paradisiaco lugar, y le comunicó su deseo de que se hiciera cargo de la dirección general de la Lotería Nacional, en lugar de Ernesto Prieto, quien se haría cargo del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
La todavía secretaria de Turismo del estado de Morelos aceptó inmediatamente con un “será un honor estar en su equipo y pondré todo mi esfuerzo”. “Entonces lo voy a hacer público el martes”, le avisó Andrés Manuel López Obrador.
Y así fue. Ayer por la mañana el mandatario federal lo dio a conocer en su ya tradicional “Mañanera”, cuando los reporteros lo cuestionaron sobre la renuncia de Jaime Cárdenas Gracia.
"Va a quedar Ernesto Prieto de la Lotería Nacional, ya se decidió", dijo AMLO. Y cuando le preguntaron quién cubriría la vacante en la Lotería Nacional agregó:
“Va Margarita Saravia, una mujer, ella va a la Lotería Nacional eso es lo que puedo aclarar, ella va a quedar ahí".
Para muchos fue sorpresa que la secretaria de Turismo de uno de los estados más pequeños de la República fuera contemplada en el gabinete presidencial. Sin embargo, hay toda una historia detrás.
Margarita González Saravia Calderón es una extraña mezcla de empresaria y activista política. A diferencia de las otras mujeres que trabajan con Cuauhtémoc Blanco, Margarita sí tiene trayectoria política y comulga con la ideología de izquierda, incluso fue candidata a diputada local por el partido Morena.
Nació en el Distrito Federal y a partir de 1984 radica en Cuernavaca. Su familia es propietaria de uno de los balnearios más importantes en la entidad, “Las Estacas”, que fundó su abuelo en 1947.
De origen aristocrático, Margarita González Saravia estudió en la escuela de monjas Colegio Francés del Pedregal y al terminar sus estudios, a los 18 años, decidió ir a ayudar a las comunidades populares y campesinas, cuando el país estaba en plena efervescencia por los sucesos estudiantiles de 1968.
En aquellos movimientos sociales de finales de los años setenta y principios de los ochenta, Margarita ya tenía una auténtica vocación de servicio. Para ella comenzaba la lucha por el cambio social y tenía ante sí la oportunidad de participar en uno de los momentos especiales donde los movimientos sociales iban a revolucionar a México entero y finalmente, tendría la oportunidad de ser partícipe de la generación de lo que ella misma siempre ha sido: una mujer de izquierda, comprometida con sus principios y sus semejantes.
Después de trabajar varios años en diferentes organizaciones sociales, conoció al ingeniero Heberto Castillo Martínez, con quien colaboró durante su campaña Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP).
Siendo Margarita integrante de la campaña del Ingeniero Castillo, Cuauhtémoc Cárdenas lanzó su candidatura para la presidencia de la República, Heberto Castillo se le unió, para dar paso al Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Ya en la época reciente Margarita organizó y fue presidenta del Patronato del Centro Histórico de Cuernavaca. La finalidad era buscar recursos para mejorar las calles de Cuernavaca, dar impulso al Consejo de Cronistas, apoyar los servicios culturales del Centro Histórico.
Por su origen empresarial y su vocación dentro del sector turístico, en 1994 es nombrada presidenta de la Asociación de Balnearios del Estado de Morelos. En 1998 fundó la “Asociación de Parques Acuáticos y Balnearios, A.C”. a nivel nacional, siendo presidenta durante cuatro años, así como la Asociación de Hoteles del Estado de Morelos y el Consejo de Turismo Estatal de Morelos.
En 1999 funge como Subsecretaria de Turismo de Morelos, en 2000 como secretaria de Desarrollo Económico y Turístico del gobierno estatal. Es en 2015 cuando es llamada por la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, a formar parte de sus proyectos de trabajo, haciéndose cargo de la labor de capacitación del Patronato Universitario.
En febrero del 2018, Margarita fue designada por Cuauhtémoc Blanco como secretaria de Desarrollo Social del Ayuntamiento de Cuernavaca, y en noviembre de ese mismo año protesta como titular de la Secretaría de Turismo y Cultura del Gobierno del Estado.
Aunque desde ayer Margarita no se da abasto en contestar los mensajes de felicitación, hacerse cargo de la Lotería Nacional (ahora fusionada con Pronósticos Deportivos) no será una tarea fácil. Tendrá un jefe muy ocurrente que no acepta un no por respuesta.
“La Rifa del Avión Presidencial” es un claro ejemplo. Primero dijo que se rifaría la aeronave que adquirió Felipe Calderón y utilizó gustoso Enrique Peña Nieto. La idea de que cualquier ciudadano tendría la oportunidad de llevarse el avión a su casa ocasionó infinidad de memes, como aquel donde aparecía un Jet llegando a una unidad habitacional de Infonavit.
Luego se optó por rifar “el equivalente a lo que cuesta el avión presidencial”, y entonces pusieron a todo mundo a vender boletos, pero como no se vendían, aplicaron aquello que se usaba en las rifas de las escuelas: “los vendes o los pagas”.
Así, las propias instituciones compraron boletos y se los regalaron a los hospitales y algunas escuelas. Con las burlas de los “conservadores” y “prianistas”, pero se llevó a cabo la rifa a través de la Lotería Nacional.
Ahora habrá que esperar a ver qué se le ocurre rifar al presidente. Y la encargada de llevar a cabo esos futuros sorteos será la morelense por adopción Margarita González Saravia.
No faltó quién viera su designación como la antesala de la candidatura a gobernadora, a la par con el subsecretario de Gobernación, Rabindranath Salazar Solorio. Los “Rabines” se escandalizaron con tal comparación, además de que aseguran que Margarita tuvo un gris desempeño como secretaria de Turismo.
En nuestra opinión, fue mucho lo que hizo con tan poco presupuesto que le asignaron.
HASTA MAÑANA.