Aunque con la Federación de Estudiantes Universitarios de Morelos se incurre en un anacronismo al ser el único ente autorizado a representar al alumnado ante los órganos de gobierno de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), al encontrarse ahora en el proceso de renovación debe cuidarse la más que cantada injerencia de los partidos políticos.
Tradicionalmente el PRI controló a ese organismo que corporativizó (a veces mediante el uso de la fuerza) la representación estudiantil, lo que no dejó ningún aporte a la sociedad.
En un afán modernizador la Universidad debería terminar el monopolio de la FEUM, pero mientras tanto debe hacer todos los esfuerzos necesarios para dejar fuera de esta elección a los partidos políticos, simplemente por salud institucional.