A veces elegir entre tantos pueblos bellos de nuestro país no es fácil. Además parece que la lista es infinita, cada vez se suman más y más. Sin embargo, estos que elegí para hacer mi top 5 no sólo tienen un encanto especial, también han sido parte importante de mis aventuras viajeras. ¿Me acompañas a recorrer cinco de mis pueblos favoritos?
Mitla, Oaxaca
Su nombre completo es San Pablo Villa de Mitla, lugar donde se encuentra una de las zonas arqueológicas más importantes del país y que en zapoteco significa “Lugar de Descanso”, ahora es uno de los cinco Pueblos Mágicos con los que cuenta el estado de Oaxaca, ya que ofrece a visitantes locales, nacionales y extranjeros, atractivos arqueológicos y riquezas naturales.
Además de contar con la conocida zona arqueológica, que es el segundo centro ceremonial más importante en el estado, el pueblo es atractivo por si mismo.
Localizado a 40 km de la ciudad de Oaxaca, en este lugar encontrarás deliciosa gastronomía local como el mole negro, colorado y amarillo, acompañado de mezcal artesanal.
Sus edificios arquitectónica y artísticamente son maravillosos, la Iglesia de San, el Bosque de piedras, la Ex Hacienda en Xaagá, el Museo Frissell —casona del siglo XIX, que cuenta con colecciones de arte zapoteco y mixteco— y las Cuevas Prehistóricas de Yagul y Mitla que fueron declaradas como Patrimonio Mundial por la UNESCO, son sólo algunos de los atractivos de este lugar.
Cuenta además con los Manantiales de Agua Blanca y algunos palenques de mezcal artesanal, que son parte de la Ruta Caminos del Mezcal, famosa en Oaxaca.
Debido a que es un pueblo pequeño, de apenas 850 habitantes, las opciones de alojamiento son limitadas, pero gracias a su cercanía con la capital es posible visitarlo en un solo día. Así que si planeas un viaje a Oaxaca no te pierdas Mitla. No puedes dejar de visitar su mercado de artesanías, y por supuesto la comida como en todo el estado es espectacular pero no abuses o la indigestión puede ser tu peor compañera de viaje.
Bernal, Querétaro
Un relajante poblado donde podrás disfrutar de la arquitectura colonial, la hermosa vista hacia la Sierra Gorda o, si necesitas mas adrenalina, puedes escalar la Peña de Bernal, un monolito de más de 8 millones de años de antigüedad.
El nombre completo del poblado es Villa de San Sebastían Bernal y es un apacible lugar que podrás recorrer a pie, para enamorarte de sus tiendas de artesanías y hasta nutrir tu guardarropa con sus prendas de lana y manta, o satisfacer ese antojo pecador con sus dulces típicos.
Desde todos los rincones del pueblo podrás apreciar la majestuosa Peña de Bernal que según cuentan está cargada de energía. La recomendación es llevar un calzado cómodo y firme, sobre todo si planeas subir la peña que por cierto, dicen, que está cargada de buena energía.
El clima en primavera y verano es caluroso durante el día, pero generalmente refresca en la noche, así que lo ideal es ir vestido en capas con prendas de fibras naturales. En invierno puede sentirse frío incluso de día.
Además si eres amante de la buena comida no te puedes perder del 15 al 31 de mayo la feria nacional del queso y el vino que ocurre en Tequisquiapan, ubicado apenas a 30 min de distancia. Allí, año con año se reúnen los productores locales de queso y vino más importantes, en medio de degustaciones de productos gourmet y catas de vinos de la región.
Así que esoteria y vida gourmet las puedes tener en un solo viaje y lo mejor es que puede ser sin alejarte demasiado del centro del país. Ahora que si te quieres aventar una aventura de fin de semana yo te aconsejaría enfilar hacia la huasteca y visitar San Joaquín, que muy recientemente también fue nombrado un pueblo mágico y que es de verdad un lugar donde se respira la esencia del pueblo mexicano.
Teotihuacán, Estado de México
Localizado a solo 50 km de la Ciudad de México, San Juan Teotihuacán es conocido por su impresionante zona arqueológica, la más grande de Mesoamérica.
La Pirámide del Sol Esta es la segunda pirámide más grande del país, superada sólo por la pirámide de Cholula, en Puebla. Tiene una altura de 64 metros y cinco cuerpos escalonados que decrecen hacia la base. Aunque no se recomienda subirla, miles de personas lo hacen, a pesar de que deben recorrer más de 160 escalones.
Pero Teotihuacán es mucho más que arqueología. Entre las muchas artesanías del lugar, vale la pena conocer las prendas hechas en telares de cintura como chales gabanes y suéteres de lana.
También vale la pena probar los platillos típicos del lugar como la barbacoa, los mixiotes de carnero, la codorniz, y los muchos platillos y ensaladas que tienen como complemento principal al nopal, uno de los tesoros más nutritivos de la zona.
En el pueblo podrás encontrar atractivos ejemplos de arquitectura colonial como el Ex-Convento de San Juan Bautista y el Templo de Nuestra Señora de la Purificación. Además, los lunes podrás visitar el tianguis donde encontrarás ricos antojitos y, si te apetece, también podrías dar un paseo en globo desde donde tendrás una vista privilegiada de la zona arqueológica.
Si te pones más exquisito, recientemente en este lugar comenzaron a crearse hoteles boutique, spa y hasta restaurantes de alta cocina para darle a este lugar del Estado de México, el toque de exclusividad que le hacía falta.
Palenque, Chiapas
Además de ser la puerta de entrada al paraíso selvático chiapaneco, Palenque cuenta con una de las Zonas Arqueológicas mas importantes del Mundo Maya. A su alrededor, se pueden visitar atractivos naturales como las cascadas de Agua Azul y las de Misol-Ha donde podrás relajarte en sus piscinas naturales y podrás encontrar cientos de especies de aves y mamíferos.
La ciudad fue fundada en 1567 por Fray Pedro Lorenzo de la Nada, quien regaló tres campanas; de éstas, en la actualidad únicamente se conserva la más grande en la iglesia de la ciudad.
La grandeza natural de Palenque se complementa con los más deliciosos platillos como el Shote con momo, los tradicionales tamales chiapanecos, el pato en chilmol, el pescado sudado y el salpicón de venado.
Si lo tuyo es la historia podrás visitar el museo Alberto Ruz Lhuillierque alberga cientos de objetos prehispánicos, así como el Museo del Textil “Lak puj kul”, donde aprenderás la historia de las vestimentas tradicionales de los mayas.
En ese lugar además de poder comprar ropa típica y otras artesanías, puedes organizarte para ir en diversos tours por los alrededores y practicar ecoturismo y turismo de aventura en medio de la impresionante naturaleza que rodea al pueblo.
Taxco, Guerrero
Se localiza en un área geográfica definida por montañas y cerros, los cuales le brindan a su horizonte cierta proyección topográfica, característica del norte de esta entidad del país. La gran explotación minera desarrollada en el lugar, en especial para la obtención de plata, consolidó a Taxco como uno de los núcleos mineros más significativos de los tiempos novohispanos. Muchos de los hermosos edificios que ennoblecen sus calles, datan precisamente de tal época dorada.
Quien recorre este lugar queda fascinado por la atmósfera virreinal que lo particulariza. Es incluso divertido perderse por sus calles empedradas llenas de casonas antiguas y escalinatas que desembocan en callejones secretos. Es delicioso sentarse sólo a admirar el paisaje en sus múltiples plazas pequeñas y encantadoras.
Taxco cuenta con varios miradores pero tal vez la mejor panorámica se obtenga desde lo alto de su teleférico que brinda una espectacular vista,
Aunque es famoso por su mercado sabatino de la plata y por su arquitectura colonial, en este lugar no te puedes perder muy pronto las Jornadas Alarconianas, una fiesta cultural dedicada al dramaturgo Juan Ruiz de Alarcón, máximo exponente del Siglo de Oro. Este festival ofrece, durante la última semana de mayo, más de un centenar de puestas en escena, totalmente gratuitas, en múltiples escenarios callejeros, que son interpretadas por compañías de teatro nacionales e internacionales. Además se ofrecen exposiciones de arte plástico, conciertos y espectáculos para toda la familia.