Su hermana y su cuñado murieron por covid-19; pide a la gente usar cubrebocas.
Guillermo García, quien trabaja como chofer de taxi desde hace nueve años, hizo un llamado a la población a usar el cubrebocas y gel antibacterial como medida de protección contra el virus, para evitar los daños que provoca el virus del covid-19, como le ocurrió en su familia.
Al respecto, dice que su familia estuvo confinada durante los meses más fuertes de pandemia, pero en septiembre su hermana menor, que vive en Michoacán, fue contagiada con el virus por su yerno, que trabaja como operador de una combi en ese estado.
Su hermana, dice, evitaba salir a la calle para no contagiarse porque tenía obesidad y recuerda que la vio por última vez hace seis meses, y cuando se contagió con el virus no pudo hablar con ella de manera presencial, solo por medio de una videollamada, pero al tercer día falleció.
Al siguiente mes, su cuñado quien vive en Atlatlahucan, se sometió a la prueba porque empezó a presentar varios síntomas. Aunque lo internaron en un hospital, a los tres días les informaron que perdió su lucha contra el coronavirus.
“No pude despedirme de mis familiares, ya no los pude ver, es una situación muy triste porque mi hermana era la más chica y dejó a sus tres hijas solas con el papá. Ella era muy amorosa. Por eso le digo a la gente que se cubran lo más que se pueda, que nunca dejen su cubrebocas para que no pasen la misma situación que en mi familia”.
De su labor, refiere que desde que empezó la pandemia ha negado al menos ocho servicios de taxi a personas que no llevan puesto el cubrebocas, porque no quiere arriesgarse y contagiar a su familia. Además, porque sus ingresos económicos apenas alcanzan para comprar lo necesario para la alimentación de su familia y no para pagar multas.
El entrevistado señala que durante su jornada laboral se ha encontrado con personas que se niegan a creer en la propagación del virus y afirman que es un invento del gobierno.
Dice que en la empresa donde trabaja, su patrón les exige usar tapabocas y ofrecer gel antibacterial a los clientes, a pesar de que algunos pasajeros se molestan.