De más de 80 unidades de la organización, sólo operan 35.
Por la contingencia sanitaria a raíz del covid-19, los ingresos de la Ruta 11 disminuyeron en un 95 por ciento y de las 83 unidades con las que cuenta esta organización, actualmente solo 35 están en funcionamiento.
Tranquilina, la encargada de la administración, informó que las corridas de redujeron a tres y en algunos casos los choferes solo realizan una vuelta porque que es más el desgaste de la unidad que el dinero ganado y en esta época no alcanza ni para el mantenimiento mensual de los carros, para el cual destinan aproximadamente dos mil 500 pesos.
Además, para las reparaciones mayores, como la caja de velocidades el costo oscila entre 18 y 25 mil pesos. Por eso los dueños no se arriesgan a desgastar las unidades, puesto que ya de por sí solo para combustible necesitan unos 432 pesos para llenar de 21 a 27 litros todos los días.
“Esta situación nos afecta mucho, en el caso de los choferes hay días que ponen de su bolsa para el combustible y entregan 200 pesos de cuenta; prácticamente estamos en quiebra y las unidades están paradas por el costo que representa sacarlas a trabajar cuando no hay pasajeros”, explicó.
La experiencia de Tranquilina en la administración del transporte colectivo es de 24 años, sin embargo, no recuerda una situación económica tan crítica como la que enfrenta este sector por la pandemia del covid-19.
Expuso que las temporadas bajas, a las cuales están acostumbrados, son durante los recesos escolares, como en Semana Santa, en temporada decembrina y en las vacaciones de verano, pero no se comparan con la situación actual.
La entrevistada empezó a trabajar en la administración de la Ruta 11 hace cinco años y en el último mes fue testigo del desempleo que se generó en la organización porque, dijo, la falta de pasajeros los obligó a detener las unidades, pues no alcanza el dinero ni para el mantenimiento satelital.
A decir de Tranquilina, fueron informados sobre los créditos que ofrece la Secretaría de Economía y del Trabajo, pero depende de las condiciones de cada permisionario pues el proyecto está sujeto a aprobación.
Sobre este financiamiento les dijeron que podrían solicitar desde 30 hasta 50 mil pesos, sin intereses y pagarían hasta el cuarto mes y después les informaron que únicamente les podrían hacer préstamos de dos mil 500 pesos, de los cuales dejarían en caja 400 pesos, por lo que optaron por no tomar los créditos.