Siguen en su puesto a pesar del riesgo de contraer la nueva enfermedad.
La contingencia por el coronavirus ahuyentó a los trabajadores de sus oficinas, a los estudiantes en las escuelas y a los comensales en los restaurantes pero eso no ocurrió en el transporte público.
“Hay que trabajar porque si descansamos no hay dinero”, dicen los choferes en los andenes del mercado Adolfo López Mateos de Cuernavaca, donde la mayoría de los conductores de “rutas” hace base.
Gerardo Durán Villegas afirma que para evitar el contagio por el Covid-19, en su caso, usa gel antibacterial, pero no cubrebocas ni guantes, porque no se lo han pedido y si le toca “pues ya ni modo”.
–¿No tiene miedo de contagiarse?
–No.
–¿No es necesario protegerse para evitar contagios por el coronavirus?
–Si te va a tocar, pues te toca; si no, pues aunque te pongas –responde.
Otro chofer del transporte público considera que es necesario usar gel y lavarse las manos de manera constante por el contacto de mano que tienen con miles de personas todos los días.
–Ustedes que manejan monedas y billetes, ¿no tienen miedo de un contagio?
–Ya estamos acostumbrados a esto, pero sí debemos tener miedo porque la gente te da la mano. Por eso traigo mi gel y me lavo las manos de manera normal.
–¿No te da miedo contagiarte?
–Sí me da miedo, pero hay que trabajar; si descansamos, no hay dinero. He visto que los pasajeros, algunos, se suben con su cubrebocas y gel, pero yo no lo uso porque me da calor.
–¿Y si te contagias?
–Pues vamos al médico.
El chofer Ramírez aplica las medidas de prevención y lleva su botella de gel antibacterial para protegerse del virus pero, asegura, no ha recibido indicaciones de su jefe para los pasajeros, tampoco si es necesario desinfectar las monedas, como lo anunciaron las autoridades de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT).
En su caso, señala, si enferma acudirá a revisión médica, mientras trabaja como todos los días en sus cuatro vueltas.
Jorge de la Cruz lleva cuatro años trabajando en la Ruta 7. Él dice que se lava las manos cuando va a comer y cuando llega a la base. Además, carga una botella de agua para enjuagarse en los ratos que tiene oportunidad, porque su responsabilidad está en el volante.
De la Ruta 7 hay algunos choferes que no están trabajando porque enfermaron de tos. En Morelos hay dos casos confirmados de Covid-19, en Cuautla y Cuernavaca.