En hashtag: pandemia

Llaman a comerciantes que se instalan los martes a acatar las disposiciones de salud para no volver a suspender su actividad económica.

Tetecala.- Las autoridades de Salud de este municipio aseguraron que se mantienen las medidas preventivas ante la situación que prevalece por la pandemia por covid-19, por lo que han reiterado la invitación a los comerciantes del tianguis tradicional de los martes a no bajar la guardia para mantener activa una de las principales actividades económicas de este lugar, como es el comercio.

Asimismo, refirieron que por su parte, mantienen la instalación de cuatro filtros sanitarios en los principales accesos de la plaza tradicional, donde se toma la temperatura, se verifica que acudan con el uso de cubrebocas y se otorga gel antibacterial, a fin de reducir el riesgo de contagio del virus.

Mencionaron que ya se encuentran trabajando todos los comerciantes de este tianguis tradicional, donde se ha promovido la sana distancia y la invitación –tanto a clientes como a comerciantes– de mantener las medidas y no confiarse, con la finalidad de evitar el aumento de casos activos de la citada enfermedad.

Las autoridades de Salud comentaron que hasta ayer, martes 17 de noviembre, en el municipio se tenía en un registro de 17 casos acumulados del virus, de los que 15 ya están recuperados, uno activo y solo un deceso.

El gobierno municipal aseguró que se mantienen los protocolos de salud ante la situación actual, por lo que invitaron a la ciudadanía a no aligerar las acciones para continuar con las actividades con las medidas de la llamada “nueva normalidad”.

A causa de la pandemia, estarán a “disponibilidad” quienes hayan tramitado la cartilla durante este año.

Cuautla.- Derivado de la pandemia por covid-19, que se vive desde hace varios meses, el Ayuntamiento de este lugar, que preside Jesús Corona Damián –a través de la Junta Municipal de Reclutamiento– informó a los jóvenes de la clase 2002 y remisos del Servicio Militar Nacional (SMN) informó que el sorteo de este año fue suspendido. Por tal motivo, se considerará el cumplimiento del SMN a “disponibilidad” a la totalidad del personal que tramitó su Cartilla de Identidad Militar (CIM) en el presente año.

Fue mediante la realización de un oficio dirigido al alcalde y presidente de la Junta Municipal de Reclutamiento como el comandante del 5/o Regimiento Mecanizado, el teniente coronel del Arma Blindada Diplomado de Estado Mayor, Francisco Pérez Conde, señaló que la recepción de cartillas expedidas en el año en curso se realizará todos los fines de semana de enero de 2021, en un horario de ocho de la mañana a una de la tarde, en las instalaciones del 5/o Regimiento Mecanizado.

Hay que destacar que para que los jóvenes de la clase 2002 y remisos puedan realizar dicho trámite se deberá presentar (en original y copia) la Cartilla de Identidad Militar, copia del acta de nacimiento, copia de la Clave Única de Registro de Población (CURP), copia de una identificación oficial con fotografía, así como de un comprobante de domicilio y último grado de estudios, además de que dicha documentación deberá ser entregada de manera personal por el interesado.

Habrá un nuevo marco jurídico para la venta de bebidas.

Las autoridades federales en México trabajan para homologar el marco jurídico nacional en materia de comercialización, publicidad y expedición de licencias para la venta de bebidas alcohólicas, incluida la oferta por internet. Además, se busca revertir el incremento en el consumo que se ha registrado durante la pandemia en hombres en edad productiva.  

La Secretaría de Salud puso en marcha en Morelos y el resto de las entidades la estrategia de prevención del alcoholismo. De acuerdo con una encuesta telefónica, en jóvenes se reportó una reducción del consumo durante el confinamiento por covid-19, debido a que hubo una limitación en la convivencia en espacios públicos, centros nocturnos, bares y antros. 

Sin embargo, el titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), Gady Zabicky Sirot, expuso que aumentó el consumo en casa, en la población de entre 30 y 40 años.  “Durante el confinamiento, el estrés, el consumo de alcohol y el malestar emocional se incrementaron en hombres, cuya edad va de las tres a las cuatro décadas”.  

Durante los primeros meses de la epidemia en México, informó la Secretaría de Salud a través de un comunicado, “se encontró que 12 por ciento de las personas aumentaron su consumo de alcohol, 39 por ciento lo disminuyó y 48 por ciento no reportó cambios en su consumo. En tanto que el incremento en la frecuencia de la ingesta diaria durante el confinamiento fue en mujeres”. 

De acuerdo con la información vertida por el director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica, Juan Manuel Quijada Gaytán, y la directora de Vinculación y Coordinación Operativa de la Conadic, Evalinda Barrón Velázquez, es notorio “el impacto en la salud mental que tiene el consumo de alcohol, como la depresión. Además puede ser causante de un estado de desnutrición cuando la ingesta es continua y crónica”. 

El organismo que agrupa a los padres de familia teme que el futuro ordenamiento permita la injerencia de directivos de escuelas en la conformación de los comités; aseguran que han sido ignorados.

La Asociación Estatal de Padres de Familia (Aepaf) pidió ser tomada en cuenta en la nueva ley en materia de educación que se analiza en el Congreso del estado, ya que la organización considera que se pretende abrir la puerta a la intervención directa de las autoridades educativas en la elección y remoción de los comités de paterfamilias. 

La diputada del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) Alejandra Flores Espinosa presentó la iniciativa de reforma a la ley de educación del estado y anunció hace uno días que el Congreso local podría aprobar la modificación antes del 15 de diciembre de este año. 

Mauricio Miranda Villalba, presidente de la Aepaf, expuso que han tenido alguna reunión con dicha legisladora y han solicitado que se eliminen algunos puntos y se incluya algunos otros que debería contemplar el marco normativo. Sin embargo, no han tenido respuesta.  

Mencionó que entre los aspectos que se detectaron en la iniciativa de la morenista en los que no están de acuerdo, destaca el que plantea que los directores de los planteles podrán promover o iniciar un proceso para remover a los comités de padres de familia de las escuelas, lo cual es una injerencia abierta y negativa en asuntos de los tutores. 

Mauricio Miranda expuso que ya en la práctica es común que las y los directores quieren meterse y realizan acciones que no están en su competencia, como lo relativo a las cuotas escolares. De hecho, refirió que es constante ver que cuando un comité de padres pide cuentas o critica el manejo de los recursos, los directores y maestros hacen lo imposible por cambiarlos.  

“Ella está tratando de darle el control de la Asociación de Padres de familia al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos, y en eso estamos totalmente en contra y de ninguna manera lo vamos a permitir; de hecho ya hablamos con autoridades de la SEP federal y nos han dicho que no es posible porque viola la libertad de asociación” abundó.  

Dijo que enviará a la legisladora un documento en el que expone claramente la postura de la Aepaf, al tiempo de dejar ver que están dispuestos a buscar el camino del amparo si fuera necesario. 

 Otro de los puntos que la asociación pidió incluir hace unos días fue establecer medidas precautorias para impedir que maestros o cualquier trabajador que haya sido denunciado por abuso sexual o violación pueda laborar en los centros escolares. Incluso que se impida que dichas personas relacionadas con esos delitos presten cualquier servicio que implique su acceso a las escuelas, como asesores, o constructores, por ejemplo.  

La asociación de igual manera propuso que en la ley se considere un apartado relativo al acoso escolar, popularmente conocido como “bullying”; con medidas como la creación de una base de información donde se compartan todos los incidentes registrados y se genere una dinámica de información respecto al manejo de ese tipo de asuntos. 

Miranda Villalba enfatizó que no bastaría con adecuar, casi como una copia, la ley de Educación del estado a la legislación federal, sino que su aspiración es tener un mejor marco normativo, apuntó.  En este sentido refirió que se propuso que la legislación contemple el papel que deben tener los maestros en la identificación de los problemas que enfrentan los estudiantes y en el manejo de los mismos. Refirió como ejemplo la función que pueden tener los docentes al notar algunos síntomas de enfermedades contagiosas. 

“En este punto nos referimos por ejemplo a lo que el propio secretario de Educación ha dicho, en el sentido de que si un maestro ve que un estudiante tiene síntomas de covid-19, el profesor puede notarlo. No se trata de que simplemente los regresen a su casa, sino que se les dé orientación y que los niños sean canalizados a las instituciones de salud” ejemplificó.  

El presidente de la Aepaf comentó que la diputada Flores Espinosa acordó entregar un ejemplar del dictamen y los avances para que todos los actores que participan en la educación pudieran opinar, pero les sorprendió que hace unos días la legisladora anunció que la propuesta está casi lista y podría ser aprobada antes de que acabe este año pese a que la asociación no conoce el documento final ni ha tenido respuesta a sus propuestas.  

El cierre de las escuelas por la pandemia golpeó seriamente a su negocio.

“Las ventas han estado súper bajas en lo que va del año. Hay veces que tengo que guardar la nieve para el día siguiente por qué no se vende, antes en las escuelas teníamos bastantes clientes y ahora solo la poca gente que hay en las calles”, se queja José Luis Flores, quien se gana la vida un carrito con el que vende nieve.

El vendedor informó que tiene que recorrer mayores distancias para poder sacar dinero para comer: “antes solo vendía en las primarias que están por los cuarteles militares y ahora tengo que ir hasta Ahuatepec y Ocotepec para poder sacar el día y que mi nieve se venda”.

Entrevistado por La Unión de Morelos, dijo que espera que la gente apoye a los pequeños comerciantes y que no bajen la guardia para no regresar al confinamiento: “ahorita más que nada necesitamos estar apoyando a la gente que menos tiene y comprar a los pequeños comercios, pero de igual manera apoyar a que no regresemos a semáforo rojo y ahí si muchos perderíamos lo poco que tenemos, porque el hambre también mata”.

La caída en la venta de paletas y nieves amenaza la supervivencia del negocio.

Derivado de las bajas ventas y de que continúan los contagios de covid-19, Yesica García, de una nevería en la colonia Buenavista de Cuernavaca, tiene temor a quedarse sin empleo.

“Yo soy encargada de este negocio y mis patrones me comentan que las ventas están muy bajas, que apenas sale para poder pagar los servicios y pagarme a mi. Si volvemos a cerrar ellos se quedarían sin su negocio y yo sin trabajo” relató Yesica García.

La trabajadora afirmó que la venta de paletas ha disminuido considerablemente: “las ventas si han bajado mucho a pesar de que hace un poco de calor. Hay días que vendemos seis paletas. Yo entiendo al dueño, porque sí no hay ventas ¿de dónde sacan para pagarme? pero si me quedo sin trabajo ¿qué voy a hacer?”

La encargada informó que la gente prefiere no comprar helados para no enfermarse: “los clientes más cercanos dicen que mejor se quedan con las ganas de comprarse una nieve, porque se pueden enfermar y sale peor la cosa”.

Por la crisis económica no puede negar el servicio, pero él se protege contra el virus.

Virgilio Miranda trabaja como chofer de taxi desde hace diez años y dice que por la crisis económica que ha dejado la pandemia del covid-19 no puede negar el servicio a los clientes que no usan cubrebocas, porque lo que hace falta es el dinero.

Cuenta que al día realiza en promedio de diez a doce servicios, de los cuales al menos dos pasajeros abordan la unidad sin llevar puesto el tapabocas, por lo que les pide cumplir con este equipo de protección, y hacen caso, pero hasta que el chofer lo indica.

“Yo uso el cubrebocas y el gel porque uno de mis amigos se contagió y creo que es necesario ayudarnos entre todos. Por eso a los pasajeros antes de subir al carro les digo que se pongan el cubrebocas, porque no les puedo negar el servicio. Y se lo ponen, pero me he dado cuenta que muchos lo traen en la bolsa de su pantalón o las señoras en su bolsa de mano y lo usan solo cuando alguien les dice, lo cual no debería ser así”.

De su labor, platica que hay días en los que con mucho esfuerzo reúne 200 pesos para entregar la cuenta a su patrón y en otras ocasiones queda a deber la cuota, porque apenas obtiene 100 pesos para la alimentación de su familia.

El entrevistado señala que por la crisis económica tuvo que solicitar varios préstamos de dos mil pesos con sus familiares, porque hay días que el dinero solo alcanza para comer y para el combustible del vehículo.

Refiere que actualmente la clientela para los taxis es escasa y a pesar de que cada día hay más personas en las calles, al menos él no ha visto un incremento porque, además, tiene competencia con el transporte privado que se ofrece por medio de las aplicaciones de teléfono.

Por el confinamiento ha perdido más del 70 por ciento de clientes en su lavandería.

Ahora que los contagios de covid 19 han subido en Morelos por la falta de cuidado de la gente, Lizet Gutiérrez tiene miedo de regresar a semáforo rojo, porque para ella implicaría perder su negocio, una lavandería en la colonia El Empleado de Cuernavaca.

“Lo que la gente no sabe es que muchos de los pequeños negocios viven de sus ventas diarias. El volver a semáforo rojo sería una perdida total de mi lavandería, la cual me ha costado mucho sudor el poder sostenerla durante estos últimos meses” dijo Lizet Gutiérrez.

La entrevistada informó que derivado del confinamiento ha perdido más del 70 por ciento de sus clientes. “La gente ya no quiere mandar su ropa a la lavandería ya que prefiere no gastar en algo que puede hacer en su casa”.

Entrevistada por La Unión de Morelos, la prestadora de servicios dijo que ella continúa dando trabajo a sus empleados a pesar de no tener ingresos estables. “Tengo dos trabajadores, una, la que me ayuda a lavar y planchar y otro que nos ayuda a repartir la ropa. Yo no quiero dejarlos sin trabajo porque ellos tienen familia y no tienen de dónde sacar dinero”.

Trabaja como repartidor de comida, pero busca otro empleo con prestaciones.

Salvador Mejía tenía un trabajo estable en una agencia de autos, donde daba mantenimiento a los vehículos, pero con la pandemia del covid-19 su patrón lo mandó a confinamiento con el 50 por ciento de su salario, lo cual -dice- no alcanzaba para la alimentación de su familia, por lo que tuvo que buscar otra fuente de ingresos.

Actualmente trabaja como repartidor de comida por medio de la aplicación de Rappi y al día realiza entre diez y doce servicios, de los cuales obtiene hasta 350 pesos diarios.

Dice que su labor tiene algunos beneficios, como trabajar las horas y días que puede. Sin embargo, también está expuesto a sufrir algún accidente vial o a ser asaltado. Agradece que en los cuatro meses que lleva trabajando como repartidor de comida no se ha enfrentado a estas situaciones.

A decir de sus compañeros, los puntos más inseguros de Cuernavaca son las colonias ubicadas en las orillas de la ciudad, como la Lagunilla y Alta vista, y también en supermercados, donde les han robado las motocicletas. 

Sin embargo, afirma que los repartidores no pueden rechazar los pedidos en colonias que consideran peligrosas, porque reciben un castigo que consiste en no tener pedidos en los próximos 40 minutos.

“A mí no me han asaltado, pero una vez fui a dejar un pedido a Alta Vista y sentí miedo porque las personas ordenaron pizzas y cuando llegué me recibieron cuatro hombres que estaban tomando y drogándose. Sí me dio miedo, porque me iban a pagar en efectivo, pero al final todo salió bien”.

Refiere que contra la situación de violencia la única defensa es mantenerse alertas y correr, porque la aplicación no los respalda en ningún tipo de asaltos o accidentes.

El personal sólo trabajará a distancia.

Luego del fallecimiento por covid de un trabajador del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), la consejera presidenta Ana Isabel León Trueba informó que las oficinas del organismo permanecerán cerradas y se evitarán las reuniones presenciales durante el proceso electoral, hasta que haya cambio de semáforo a verde.

De acuerdo con la consejera electoral, desde marzo a la fecha las instalaciones del Impepac han permanecido cerradas, aunque se empezaron a desarrollar algunas actividades escenciales.

Sin embargo, dijo que ante el primer caso de fallecimiento por covid-19 de un trabajador, se pidió a los empleados permanecer en casa y sólo salir para realizar actividades básicas.

Admitió que la situación es complicada, sobre todo por el desarrollo del proceso electoral.  Sin embargo, indicó que se buscará que todas las reuniones sean virtuales, hasta que la autoridad en materia de salud indique lo contrario por cambio de semáforo a verde.

"El trabajo se va a realizar desde casa y las sesiones también. Vamos a evitar el contacto directo con las personas. Esa es la medida fundamental. También no tener reuniones de largas duración en dado caso", añadió.
Indicó que estarán atentos del comportamiento de la pandemia el próximo año, cuando se deberán desarrollar las precampañas, campañas y posteriormente, las elecciones, a fin de establecer los protocolos de seguridad sanitaria que la autoridad considere necesarios.

Brenda se vio obligada a ello ante el alza de los costos de los insumos que necesita para surtir su negocio.

El negocio de tacos de canasta de Brenda Carbajal -localizado en la avenida Alta Tensión de Cuernavaca- solo genera bajos ingresos, debido a que por el confinamiento bajo la clientela.

“La gente casi no sale y está todo tranquilo y mucha gente no viene a comprar conmigo ya que prefieren ahorrar unos cuantos pesos y simplemente ya no compran comida en las calles. Antes muchos compraban para desayunar en sus oficinas y ahora por lo mismo que no hay muchos trabajadores nosotros no tenemos muchos ingresos” contó Brenda Carbajal.

La mujer ha notado que los insumos que utiliza han aumentado de precio, lo que la obliga a preparar menos tacos de canasta: “se ha notado bastante que ya todo subió de precio. Yo compro lo más común para los tacos y la verdad es que sí hay muchas cosas que ya no compro, porque no me alcanza y las tengo que sustituir por otras más baratas. Ya no hago la misma cantidad de tacos porque salgo perdiendo y así no conviene”.

Entrevistada por La Unión de Morelos, la comerciante comentó que tuvo que subir el costo de su mercancía: “tenemos que subir un poco el precio del taco, ya que todo está subiendo y así no conviene vender. La gente casi no se queja porque entiende el problema que todos estamos pasando” es el relato de Brenda Carbajal, propietaria de un puesto de tacos de canasta en una de las principales avenidas de Cuernavaca.

A Diana le preocupa que por la falta de cuidados de la gente, el semáforo sanitario regrese al color rojo.

“La he visto complicado. Es muy difícil pero tenemos que seguir dando lo mejor para sacar lo del día. A veces no sacamos casi nada porque vendemos muy poco”, es el relato del día a día de Diana Flores Hernández, propietaria de una tienda de abarrotes en el centro de Xochitepec, quien asegura que con lo que gana durante este confinamiento solo le alcanza para subsistir.

La comerciante contó que algunos proveedores le apoyan cambiando el producto ya caducado: “como hay productos que casi no se venden se nos caducan aquí en la tienda, pero algunos proveedores nos echan la mano en cambiarlos por unos nuevos y eso nos beneficia mucho. Aparte es un alivio para nosotros”.

La entrevistada comentó su preocupación por qué Morelos regrese a semáforo rojo: “yo veo que la gente no se cuida como debería, muchos no tienen cubrebocas y salen a las calles sin protección alguna. Eso nos afecta a los comerciantes y los que venden cosas, porque si volvemos a encerrarnos en la casa nosotros perdemos”.

Durante su jornada regala cubrebocas a los pasajeros que no lo usan.

Daniel Ramírez trabaja como músico y vende artesanías afuera de la Catedral de Cuernavaca, sin embargo, por la contingencia sanitaria del covid-19 y la falta de ingresos económicos tuvo que buscar otro empleo, para solventar gastos en su casa.

De su trabajo como chofer de taxi cuenta que algunos pasajeros se niegan a usar el cubrebocas y hasta se ofenden cuando les obsequia uno con el argumento de que “cuando te toca, te toca”.

El entrevistado refiere que por la crisis económica trabaja de lunes a domingo y en ocasiones también durante la madrugada porque hay días en los que con mucho esfuerzo logra reunir 250 pesos para la cuenta, otros 200 para el combustible y 100 pesos para él.

Afirma que durante su jornada laboral usa el tapabocas, pues aunque afortunadamente nadie de sus conocidos se ha contagiado, su esposa es enfermera y le dice que es necesario protegerse para evitar contagios de covid-19.

“Empecé (como chofer de taxi) hace dos meses porque ahorita no hay eventos para los músicos y las artesanías tampoco se venden. Tengo un puesto en la calle Matamoros de Cuernavaca, junto al banco, y a veces también me instalo en la Catedral; ahí vendo collares y pulseras, pero ahorita en contingencia no se venden, por eso decidí buscar otro empleo”.

Dice que como músico tocaba principalmente en eventos culturales y fiestas con grupos versátiles. Sin embargo, por la contingencia no hay trabajo ni apoyos económicos para este sector, y recuerda que desde que llegó la pandemia en la colonia donde vive, León Gaspar, entre Cuernavaca y Temixco, solo les entregaron dos despensas. 

Aseguran que desestimula la labor de profesores y padres de familia y produce desigualdad.

Los lineamientos de evaluación emitidas por las autoridades educativas podrían desalentar la participación de padres y maestros, incrementan la inequidad entre los estudiantes que no cuentan con acceso a internet y dispositivos electrónicos y sólo posponen la carga administrativa para los maestros.  

Así lo aseguró el representante de la Coalición de Trabajadores de la Educación del Estado de Morelos (Coatemor) Yossmin Castillo Castrejón, al señalar que se requiere de un replanteamiento en la forma de evaluar a los estudiantes de nivel básico durante éste período de pandemia.  

Esta semana, la Secretaría de Educación Pública (SEP) emitió el documento denominado "Orientaciones pedagógicas y criterios para la evaluación del aprendizaje para la educación preescolar, primaria y secundaria en el periodo de contingencia sanitaria generada por el virus SARS-CoV-2 (covid-19) para el ciclo escolar 2020-2021”.  Según estos criterios, aplicables en el primer trimestre del ciclo escolar, las calificaciones numéricas pasarán a segundo término y los docentes deberán tomar en cuenta las condiciones de cada estudiante y posponer la evaluación hasta los siguientes periodos.  

En aquellos casos en los que no haya comunicación constante con los educandos, los docentes podrán anotar en la boleta simplemente “sin información” y en aquellos donde la comunicación y atención sea constante o permanente podrán aplicar calificaciones.  

Al respecto, Castillo Castrejón refirió que dichos lineamientos no tienen novedades reales ni avances pedagógicos. Las recomendaciones de fortalecer la comunicación con las y los estudiantes ya se habían dado en el acuerdo oficial correspondiente al inicio del ciclo.  

“Yo diría que lo que primero tienen que hacer el Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos y la SEP es, con todo respeto, poner a directores y mandos superiores a leer el documento y el anexo de los acuerdos”, expresó, al aseverar que para estas fechas a muchos maestros en Morelos ya les pidieron las primeras calificaciones y evidencias de exámenes, entre otros requisitos.   

Además -añadió- los directivos de las escuelas deberían aplicar justamente el anexo técnico número uno de la SEP, sobre orientaciones para apoyar el estudio de estudiantes, porque la mayoría están dejando todo el peso a los maestros, de localizar a los padres, de dar seguimiento y acompañamiento a la labor de los profesores. Ellos, subrayó, son quienes deberían estar comunicándose con los padres que no hayan tenido esa comunicación.  

El próximo 13 de noviembre en el calendario escolar está considerado como día sin clases habituales “para descarga administrativa”, precisamente para que los maestros puedan realizar todo este trabajo, pero apenas se emitieron los lineamientos federales el pasado domingo.  

Para Castillo Castrejón, dichos lineamientos señalan que a aquellos alumnos con los que el contacto sea muy poco o nulo no se les va a poner calificación, sólo pondrán dos líneas diagonales por este primer bimestre, pero faltan dos en el año.  

Aseveró que esta disposición desmotiva completamente a los alumnos y a los padres y madres que están haciendo todo el esfuerzo a pesar de las limitantes impuestas por la pandemia, porque a final de cuentas, a los que sí entregan trabajos les pondrán calificación y a los que no, simplemente no les pondrán nada, y no habrá reprobados. “Están jugando a la escuelita, porque al final de cuentas van a salir igual que cuando terminó el pasado ciclo escolar, que dijeron ‘pásalos con seis, no los repruebes’. Entonces aquel papá o mamá que está esforzándose, dedicando tiempo, pagando el internet, metiéndole crédito al celular, buscándole en la televisión, ya dirá que mejor lo deja así, porque al final a su hija o su hijo lo van a pasar. No se trata de eso, se trata de aprendizaje”.  

El representante de Coatemor consideró que se debería motivar la localización de las y los niños a través de los directores, dejarles cuadernillos de tareas, considerar revisiones semanales, entre otras estrategias que han aplicado en la práctica muchos maestros por iniciativa propia. Estas disposiciones son injustas e inequitativas, reiteró.

Aseguró que pedagógicamente se genera un problema creciente, porque los estudiantes para el próximo año no tendrán los conocimientos necesarios para cursar el siguiente grado y más aún quienes pasan de tercero de preescolar a primero de primaria y los que salen de primaria y van a ingresar a secundaria y los que entrarán a preparatoria.  

A decir de Castillo Castrejón, tales lineamientos, tal y como se expresan, hacen que la inequidad se profundice porque habrá niños con algunos conocimientos y otros con nulo aprendizaje.  

Ratificó la postura de la Coatemor en el sentido de que las autoridades deberían estar buscando alternativas para garantizar el mayor acceso posible a internet. En este sentido refirió que la SEP tiene la capacidad técnica para ofrecer en sus espacios acceso gratuito a internet para maestros y alumnos, en horarios de clase, así como crearon la cuenta digital a través de la denominada “escuela mexicana”. En las zonas rurales, dotarles de televisión y esquemas de comunicación con los profesores, porque los programas de televisión no son suficientes si los estudiantes no pueden mandar su trabajo a los docentes.   

Lamentó que con dicho documento no se acaba la incertidumbre para las madres y padres de familia respecto a la forma de evaluar, por las condiciones injustas que se plantean y porque sólo se pospone la evaluación al final del ciclo escolar.  

Para el magisterio, sólo se está generando más carga de trabajo al final del ciclo escolar.   

López-Gatell, subsecretario de Salud, señaló que se registró “una importante reducción de la pandemia”, cuyo índice de positividad disminuyó al ubicarse en 38% para la semana 44

La comerciante dice que absorbió los aumentos de la mercancía para ayudar a sus clientes.

Para María Villalobos -quien se dedica a la venta de frutas y verduras en el poblado de Ahuatepec- el confinamiento no ha afectado su negocio, gracias a que -dice- mantiene los precios fijos para ayudar a sus vecinos y clientes.

“Aunque los precios sí subieron bastante yo prefiero darlos en el mismo precio que los daba, porque yo sé que la gente no tiene mucho dinero y prefiero ganar poco y vender todo y así poder ayudar a los vecinos que me compran”.

La comerciante comentó que Ahuatepec se ha visto afectado por varios contagios de covid-19: “a mi sí me da miedo que mi familia o yo nos contagiemos. Aquí se comenta mucho que varios están contagiados y por eso uno vive así con la angustia, pero tenemos que seguir trabajando y cuidarnos mucho”.

Entrevistada por La Unión de Morelos, María Villalobos dijo que ella utiliza todas las medidas de salud para prevenir contagios en su negocio: “para protegerme siempre uso cubrebocas y le digo a mis clientes que se queden afuera del negocio y yo les doy la cosas para que tampoco se amontonen aquí.  Cerrar tampoco es conveniente porque la gente del poblado ya sabe que aquí compra bueno y barato”.

“Yo tengo más de 25 años vendiendo aquí. La gente ya sabe que estamos todos los días aunque esté lloviendo, aunque esté la pandemia o lo que venga, aquí vamos a estar apoyando a quien lo necesite” relató María Villalobos.

No puede acceder a los apoyos gubernamentales porque carecen de registro ante Hacienda.

Zona sur. Hasta un 50 por ciento de los comercios de Jojutla no pueden acceder a los apoyos de gobierno porque no cumplen con los requisitos que establecen sus reglas de operación, afirmó Christian Ariel Zenteno Nah, presidente de la Asociación Únete, tras resaltar que buscan un acercamiento con las autoridades estatales lograr mayor flexibilidad en este tipo de apoyos. 

Lo anterior, luego de que comentó que el sector comercial enfrenta una difícil situación por el tema de la pandemia, ya que a la fecha no han logrado recuperar su actividad.

Zenteno Nah mencionó que tras la afectación económica por la pandemia por covid-19 ha habido buenas intenciones pro parte de los gobiernos tanto federal como estatal, que ofrecen créditos de tasa cero y otros apoyos. "El detalle es que lo que hemos visto es que estos apoyos van enfocados a los negocios que están debidamente registrados con Hacienda, quienes cumplen con todos los requisitos que establecen. Sin embargo, hasta un 50 por ciento de los comerciantes no cumplen y por ello no han podido acceder a ellos", señaló.

Comentó que ha sido complicado que los comerciantes de la región logren reunir todos los requisitos y por ende quedan fuera de este tipo de programas. 

Agregó que en trabajo conjunto con otras agrupaciones y asociaciones de comerciantes buscan unir fuerzas para generar mesas de trabajo con las dependencias estatales, a fin de que se permita hacer accesibles este tipo de apoyos para recuperar la actividad comercial en la región y evitar el cierre de negocios, ante la difícil situación generada por la pandemia. 

El presidente de la asociación Únete mencionó que estarán trabajando con otras agrupaciones a fin de generar las condiciones para avanzar en el tema de la reactivación económica de la zona sur.

Líder de transportistas reconoce “pago de mordidas” para evitar multas “impagables”.

El presidente del Grupo Unido del Transporte en el Estado de Morelos "Independencia", Enrique Rodríguez Zagal, afirmó que a raíz de la emergencia sanitaria, policías de tránsito emprendieron una "cacería" en contra de los taxistas, que constantemente son detenidos y a cambio de no ser multados les cobran "mordidas".

El líder transportista acusó que los elementos de tránsito imponen multas impagables por faltas que en muchas ocasiones no cometieron y los choferes optan por pagar la famosa "mordida".

“Por no traer la licencia de conducir porque se le olvidó en su casa, le aplican una multa de 14 mil pesos. ¿Quién va a poderla pagar en la pandemia?" puso como ejemplo el líder transportista.

Señaló que estos hechos de corrupción se cometen principalmente en la zona metropolitana del estado, donde los policías se ubican en las vialidades más transitadas para detener a los taxistas y hasta los ruteros son víctimas de esos hechos de corrupción.

"Están buscando recaudar y la recaudación que no sabemos a dónde va, porque por un lado se busca recaudar y por el otro  está el ‘moche’, el ‘entre’ para los policías", manifestó.
Rodríguez Zagal lamentó que no exista ningún tipo de apoyo para el transportista y, que pese a la situación económica, se le siga extorsionando.

Estudia y trabaja para ayudar con los gastos a sus papás.

A raíz de la contingencia sanitaria por el covid-19 y la suspensión de clases presenciales, Milton Eduardo Salgado empezó a trabajar como repartidor de comida a través de la aplicación de teléfono de Uber Eats, para ayudar con los gastos económicos a sus papás.

Agradece que cuenta con el apoyo económico de sus padres para terminar su carrera universitaria en Dirección y Administración de Empresas. Sin embargo, empezó a trabajar porque en un futuro le gustaría tener su propia empresa.

Actualmente, trabaja de ocho de la mañana a dos de la tarde y después toma clases en línea en una universidad privada. 

Refiere que sus ingresos son de hasta mil 500 pesos semanales porque hay fines de semana en los que realiza hasta doce servicios, pero en otros días con mucho esfuerzo lleva entre dos y cinco pedidos de alimentos.

Del dinero que obtiene cada semana entrega un porcentaje a sus papás para comprar lo necesario para la alimentación y pagar diferentes servicios, lo demás lo utiliza para pagar el internet de su teléfono, la gasolina de su motocicleta y gastos personales.   

“Hace tiempo un amigo me invitó a registrarme en la aplicación de Uber, pero no lo hice porque me di cuenta que no daban prestaciones ni seguro social y cuando empezó la contingencia vi que había mucha demanda y yo tenía mucho tiempo libre, y entonces empecé a trabajar”.

Dice que al principio su mamá le externaba su preocupación por los índices de inseguridad y de manera constante le llamaba por teléfono para saber en qué lugares se encontraba. Por eso evita entrar en colonias donde le dicen sus compañeros que son peligrosas como la Barona y la Lagunilla en Cuernavaca.

“Ahorita a mi mamá ya le da alegría porque ve que mi trabajo es en serio y apoyo con los gastos en la casa. Mi papá siempre me da su apoyo y ninguno me exige que trabaje, lo hago por gusto".

Aún persisten las dificultades derivadas de la pandemia; empresarios y prestadores de servicios exhortan a la ciudadanía a consumir lo local.

Jojutla.- La recuperación económica para el comercio y los prestadores de servicios del municipio tras la afectación por la pandemia ha sido lenta y paulatina, por lo que invitan a la ciudadanía a consumir lo local.

Lo anterior fue dado a conocer por Christian Ariel Zenteno Nah, presidente de la Asociación Únete, quien señaló que derivado de la pandemia por covid-19, todos los comerciantes se han visto severamente afectados.

“Estuvimos cerrados unos meses, resistiendo los gastos; unos ya volvieron a abrir, otros más tuvieron que cerrar por la situación”, dijo.

Agregó que trabajan para reactivar la economía, “por eso estamos pidiendo que nos apoyen con el consumo local para que podamos ir recuperando la actividad, las fuentes de empleo y la economía en general”, apuntó. 

Zenteno Nah mencionó que a causa de la pandemia, tres negocios de su organización cerraron de manera definitiva, sobre todo de venta de ropa.

“Ya no les fue posible volver a abrir y prefieren cerrar; los demás comercios y servicios de esta organización ya estamos activos, con todas las medidas sanitarias para protegernos nosotros y a nuestros clientes. Pero todavía mantenemos una disminución del 70 por ciento en nuestras ventas, a diferencia de años anteriores; ha ido mejorando poco a poco de manera gradual, es una situación económica general que está afectándonos a todos”, añadió.

Recordó que el sector comercial venía de una complicada recuperación como consecuencia del sismo del 19 de noviembre de 2017, que se complicó con este tema de la pandemia.

Por ello reiteró la invitación a la ciudadanía a consumir los productos y servicios locales con el fin de abonar al fortalecimiento de la economía local para generar mayores empleos y mayor actividad económica.