La historia relata la vida de Krishnna, un niño de aproximadamente ocho años que es abandonado por su madre en la carpa de un circo, condicionado a no regresar a casa a menos de que no consiga 500 rupias; es abandonado a su suerte, sin siquiera alimento o un techo donde dormir y la gente del circo lo hace a un lado, por lo que decide tomar un tren hasta Bombay.

Y así comienza la odisea de Krishnna por conseguir vivir en un lugar que le es ajeno. 

A su llegada conoce a varios niños que viven en la misma situación que él y  de inmediato es acogido; poco a poco comienza a habituarse y es así como consigue varios empleos ocasionales haciendo mandados u alguna otra actividad por algunas monedas siquiera para poder comer.

Su vida por lo menos ya no es tan desafortunada como antes, pero para continuar tiene que seguir trabajando para conseguir su sueño y volver con su familia. Sin embargo, comienza a darse cuenta que esa vida ya no es tan importante y que ha encontrado una nueva familia, una familia para la cual es importante, una familia con la que se siente mejor por lo que decide no volver jamás a su antigua vida.

Por lo menos atendiendo en el té en el bar de Chacha o siendo amigo de un camello.

Por otro lado la película, de forma paralela, relata la historia de varios niños que son hijos de mujeres que trabajan en la zona roja de la India. Ahí un grupo de activistas visitan a los niños e imparten talleres de fotografía y otras actividades para impulsar y cambiar un poco sus perspectivas reales de su vida, las niñas correrán la misma suerte de su madre y los niños, el vandalismo, lo que nos da como resultado una mirada cruel a la desafortunada vida de estos personajes.

La cinta tuvo muy buena aceptación por la crítica, obteniendo varios premios, inclusive la Cámara de Oro del Festival Internacional de Cannes, entre otros.

La filmografía de Mira Nair es muy variada: va desde el género erótico hasta el documental, como es el caso de Salaam Bombay, donde el tema, a pesar de ser una cinta de 1988, es tan actual e igual de crudo como en estos días.