Por cierto, pocos hombres como políticos se han destacado por su institucionalidad y profundo amor a la patria y sobre todo al estado donde pasó sus últimos años, a pesar de que nunca se supo con certeza donde vio la primera luz, entregó todo su esfuerzo y tenacidad por transformar las estructuras del estado, encontrar nuevos caminos de desarrollo y en particular sembrar esperanza entre aquellos menos favorecidos económicamente.
Con nuestra casa editorial sostuvo un vínculo inseparable, fue incluso parte de su proyecto y de la visión de desarrollar un medio informativo comprometido con las mejores causas, aunque esto incluyera la crítica y el cuestionamiento de quienes en el ejercicio del poder público cometían o siguen cometiendo exceso, algo que desde luego resulta muy incómodo a los aludidos.
Baste decir que debido a todo eso, Ortega Martínez se convirtió en consejero vitalicio de la Unión de Morelos y en la medida de sus posibilidades, ciertamente orientó y sugirió campañas y proyectos enfocados a defender lo nuestro, a mantener los valores y las tradiciones, a sembrar la esperanza y promover el bien como instrumentos para poder mejorar los niveles de vida de la población.
Por ello, como un homenaje a tan destacado personaje es que entre los objetivos centrales de la línea editorial de este medio informativo, está el desarrollar programas de identidad entre los morelenses, en medio de un entorno de mucha confusión y desánimo que reclama ese tipo de actitudes en lugar de promover la violencia como sucede en otros casos, ciertamente muy penosos.
Deseamos hacer hincapié en la decisión de la Presidencia Municipal de honrar su memoria, dándole su nombre al bulevar Cuauhnáhuac, porque no obstante errores que pudo haber cometido como ser humano, difícilmente alguien de buenas intenciones y sin intereses distintos, podría negar que el estado le debe mucho de lo bueno que a lo largo de la historia ha logrado, al sexenio que correspondió a su mandato.
La profunda amistad que existía entre LOM y el director general de nuestro medio, Mario Estrada Elizondo, hizo posible un acercamiento que llevó a la aplicación de visiones conjuntas que buscaran hacer de la información un instrumento de entendimiento entre las personas y los morelenses en general.
PAN-G5 QUIEREN LO SUYO
Y en otro tema, el Partido Acción Nacional (PAN) y el Grupo de los cinco vienen buscando unidad a fin de aplicar algunas estrategias, que les permitan tener decisiones en temas importantes como la distribución de espacios al interior del recinto legislativo o en temas como el de la aprobación de la Ley de Ingresos y Egresos del Gobierno estatal.
Lo anterior, para aprovechar el desorden y falta de acuerdos entre los diputados de la fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que por lo menos hasta el día que cerraron periodo ordinario de sesiones, continuaban con desacuerdos profundos entre ellos.
Bueno, ya el nuevo bloque habla de buscar un encuentro con el gobernador Marco Adame Castillo, para ir preparando el terreno en lo que tiene que ver con el presupuesto 2011.
Todo lo anterior no está mal como medida de presión para que los tricolores entren en razón, sin embargo dentro del G-5 y del mismo PAN hay representantes populares comprometidos con el bloque priísta y cuyos acuerdos difícilmente podrán romper.
Estaríamos hablando mínimamente de 3 de los 15 que andan en busca de conformar ese grupo que pueda generar equilibrio en la Cámara de Diputados, una vez que reinicie el nuevo periodo el primero de septiembre.
Pero aunque esos 15 se mantuvieran consolidados, de todos modos necesitarían de la suma de otros legisladores, porque para aprobar la Ley de Ingresos por lo menos hay que disponer de la mayoría y ellos solos no son suficientes.
Pero ya los dirigentes partidistas del PAN y el PRD se metieron a la pelea en medio de los dimes y diretes, no podían quedarse fuera de la polémica, andan buscando lo suyo y todo eso son reflectores frente al electorado.
