A cada paso, esta administración continúa mostrando una serie de inconsistencias e irregularidades que se cometieron en el reciente pasado y sobre todo, haciendo énfasis en la cuestión económica, ateniéndonos a lo que se menciona, MAC convirtió el Gobierno en una agencia de colocaciones para todo tipo de personajes influyentes y desde luego, gente ligada al Partido Acción Nacional (PAN).
Bueno, lo menos que se dice es que se crearon direcciones y jefaturas de área que no tienen razón de ser, y esto sucedió exclusivamente para darle espacio a ese tipo de personajes que suelen vivir del erario público, toda esa estructura, se señala, desaparecerá y generará economías al nuevo régimen.
No descartamos que todo esto tenga la intención de distraer la atención social mientras se logra algo que justifique la estancia de la nueva gestión en Casa Morelos; han intentado mostrar un nuevo rostro en materia de justicia y seguridad, pero las cosas andan tan mal o peor que antes, así que requieren de algo más para entretenernos mientras desarrollan alguna acción valiosa.
No tenemos siquiera la oferta de un plan de 100 días de Gobierno, como suele darse en cada inicio sexenal; de todas maneras Adame no debe andar preocupado, seguramente sabe que su sucesor Graco Ramírez no iniciará nada en contra suya de manera directa, pero de todos modos la situación le viene pegando por todos lados y eso es daño a su imagen.
¿Y los acuerdos?, mucho se insistió en una especie de pacto que lógicamente llegó a lo electoral, un compromiso de apoyo recíproco que para el ex gobernador representaba no ser tocado en sus acciones y ver hacia adelante, esto como que no se cumple y por el contrario, ya hay muchos señalamientos que llevan a considerar un elevado índice de corrupción en la administración pasada.
Así como va la situación, es muy posible que acabemos con denuncias muy concretas en contra de algunos ex funcionarios por desvío de recursos, aunque todavía lo apreciamos como un modo de buscar una justificación a un nulo desempeño de la administración, claro, también estamos conscientes de que únicamente llevan un poco más de un mes al frente.
Pero hemos escuchado tantas cosas, que ya no sabemos por dónde continuarán mañana, todavía seguimos esperando alguna información más respecto a aquel señalamiento hecho el primero de octubre cuando GRG tomó protesta, en contra de una empresa que viene extrayendo metales preciosos en el cerro de Tetlama a costa de generar contaminación peligrosa muy cerca de las pirámides de Xochicalco, ¿sería únicamente para que la empresa se reportara?, no lo sabemos.
Pero como esto, hay muchos otros asuntos que se antojan conflictos gratuitos, como en el caso del sindicato de maestros, ayer se volvió a insistir en ello y con una posición de confrontación.
Blindaje, remodelaciones, ¿austeridad?
Por otra parte, ayer se presentó a los medios el decreto de austeridad que pretende generar ahorros y reducir gasto corriente en diversos conceptos de la actividad gubernamental, ya sea mediante el uso racional de los vehículos, el uso de telefonía o hasta gastos de representación, sin embargo, esto parece chocar con la instalación de espacios blindados en Casa de Morelos y desde luego, la remodelación integral de despachos y oficinas.
Incluso el despacho del Poder Ejecutivo está cerrado, porque se está transformando de manera integral, pero las mejoras se extienden a buena parte del primer piso del edificio de Gobierno.
Ya sabemos que los sucesores tienen una especie de animadversión a utilizar los objetos de su antecesor, particularmente los muebles y algunos otros artículos de uso muy personal, sin embargo, tampoco es como para rehacer los espacios públicos y menos cuando no se cuenta con solvencia presupuestal para tal efecto.
Además, bajo el concepto de Áreas de Trabajo Dignas (ATDs), la administración pasada estuvo mejorando casi todas las oficinas de esa sede oficial los últimos dos años, es decir, tampoco estaba tan mal la cosa, particularmente pensando en que la economía popular anda de cabeza, que salvo algunas carreteras y hospitales construidos, los pueblos y comunidades viven un histórico rezago en obra pública como drenajes, redes de abastecimiento de agua potable, alumbrado, pavimentaciones y todo aquello que mejore el nivel de vida de la población.
Muy bien eso de la austeridad, pero habrá que darle seguimiento, primero, para ver que en realidad se trabaje en ello y segundo, para verificar que los ahorros se canalicen a cuestiones que tengan que ver con el bienestar colectivo y no con el buen vivir de los servidores públicos.
Si se ha llegado recurrentemente al abuso en la utilización de los vehículos oficiales, los entregados a resguardo de funcionarios acaban dando servicio a la familia de estos, para ir de compras al mercado o llevar y traer los hijos de la escuela, eso no se puede negar, ojalá que por fin acabemos con esos vicios invencibles.
Igual en materia del fondo revolvente, es dinero manejado a discreción y en bien personal de los jefes, dicen que todo eso será historia, ojalá no descubramos nuevas formas de succionar dineros del erario, porque para tal efecto parecen ya formadas algunas estructuras al interior del Gobierno naciente.