Hay algunos de ellos que salen por el mismo propósito, disputar una candidatura del Congreso local. En ese sentido pensamos que camina uno de los más cercanos del alcalde, Jorge Mario García; el muchacho seguramente buscará un espacio en el Poder Legislativo.
Otros llevan la encomienda de fortalecer el trabajo preelectoral de Martínez Garrigós, sobre todo hacia el interior del estado, porque de alcanzar la nominación, tendrá que acelerar el esfuerzo en el resto de los 33 municipios a través de estructuras que, entendemos, ya vienen haciendo lo propio, y lo ha dejado ver en la realización de sendas reuniones multitudinarias.
Nos acercamos a la hora de la verdad. Hasta hoy, seguimos viendo sólo un cercano competidor por la misma candidatura: el dirigente estatal del tricolor, Amado Orihuela Trejo, quien por su propia posición, tiene instrumentos para disputarle la estafeta.
Hay varios más autonombrados aspirantes; sin embargo, están bastante lejos en posibilidades reales y seguramente acabarán dándole cuerpo a una fórmula para la suma de activos, que seguramente van a necesitar porque no obstante algunas señales favorables, las cosas no serán del todo fácil.
A diferencia del resto de sus adversarios internos, MMG ha sido el único que ha mostrado hacia afuera cierto poder de convocatoria, mediante encuentros multitudinarios. El más sobre saliente fue cuando rindió su segundo informe de labores. Algunos estimaron en más de 30 mil la concurrencia.
Pero con anterioridad encabezó actos de 15 o 20 mil personas que dan fe de la capacidad de respuesta de la estructura territorial de trabajo. Algunos observadores y sobre todo sus críticos han intentado descalificar los eventos multitudinarios sosteniendo que se trata del clásico "acarreo". Lo cierto es que aunque así fuera, no debe ser nada fácil convocar a 30 mil o más. Por eso nadie más lo ha hecho.
Pero tenemos entendido que igualmente, a diferencia de la mayoría de los "suspirantes", MMG, por la misma trascendencia del cargo que desempeña, ha logrado tejer una interesante red de relaciones con destacados políticos priistas de primerísimo nivel y con responsabilidades que dan margen a generar apoyos indispensables para una eventual contienda constitucional.
Es decir, por un lado, ha estado cultivando una permanente cercanía con quienes deciden el rumbo de una elección, los electores, y, por el otro, buscando el apoyo y la "bendición" de aquellos personajes que pueden inducir a su favor la candidatura desde el CEN del PRI.
Pero no sólo eso, ser candidato al gobierno de un estado no es cosa de juego; se necesita de un apoyo inimaginable en todos los sentidos, particularmente en el económico. Por eso se debe contar con respaldo y "padrinos" con mucho poder político y de dinero, tenemos entendido que Martínez Garrigós ya tiene resuelta la mayor parte de lo que se requiere en ese sentido. Por eso consideramos que está muy cerca del objetivo; de otra manera, no estaría tan intensamente trabajando en un esquema que se antoja prácticamente completo.
Mire que ha sido sometido a presión y golpeteo de todos lados casi de forma permanente. Apenas inició su administración, el panismo se le fue con todo utilizando al delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes; le sabotearon el proyecto de construcción del segundo nivel en Plan de Ayala.
Quisieron hacer lo mismo con la mejora en avenida Morelos y el distribuidor vial Emiliano Zapata en Buena Vista, pero ya no pudieron.
En una alianza muy discreta con el PRD, los azules siguen buscando por dónde aflojarlo, apoyados por algunos medios de comunicación que no pudieron lograr contratos publicitarios a la medida de sus ambiciones, pero todo indica que eso lo ha hecho madurar más apresuradamente y ser más precavido en su desempeño y sus declaraciones públicas.
Pero la decisión definitiva está en manos de la dirigencia nacional de su partido, desde luego, con una elevada dosis de intervención de quien seguramente será el candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, que busca candidatos rentables electoralmente.