Cabe señalar que Miguel Ángel llegó al cargo con el respaldo de Rabín. Fue éste quien arriesgando mucho propuso a quien fungió como director del sistema de agua potable durante su gestión, y el papel que desempeñó fue muy cuestionable, le atribuyeron muchos malos manejos y a pesar de eso logró ganar la elección, pero apoyado en el nombre del hoy diputado.

La destitución de su hermano seguramente le habrá causado molestia. Sin embargo, pareciera que el actual edil quiere sacudirse su sombra y ha optado por sacudirse esta recomendación. No obstante, los pronósticos en torno a la figura de Rabadán son bastante desalentadores.

Se sigue insistiendo en la existencia de serias irregularidades en el manejo administrativo de la comuna y en particular en la presencia en nóminas de decenas de "aviadores" que están dejando en quiebra las finanzas públicas del Ayuntamiento.

A decir de uno de los empleados de la misma, familiares de regidores, funcionarios, del propio edil cobran importantes cantidades quincenalmente sin desarrollar ninguna responsabilidad laboral.

A ello se debe que hace unas semanas les cortaran el servicio telefónico, la luz y pospusieran el pago de salarios a los empleados, por la grave sangría que viene sufriendo el presupuesto local.

Bajo estas circunstancias, se estima que la separación del cargo en tesorería del hermano es una acción finalmente benéfica para Rabindranath, porque el actual Ayuntamiento entregará muy malas cuentas.

Hay quienes sostienen que el alcalde no lo despidió; fue Hannaman quien renunció a esa responsabilidad porque estaba siendo obligado a validar acciones que evidentemente están fuera de toda legalidad y al final sería responsable.

Nos parece más razonable esta versión, porque las cosas andan bastante preocupantes y no pocos van a tener que ser llamados a cuentas seguramente por la Auditoría Superior de Fiscalización (ASF).

El perredista se ha olvidado que en la ASF ya no hay cómplices. Durante algunos años contaron con la complicidad de quien fuera su titular, Gerardo Casamata Gómez. Fue el PRD el que lo instaló en esa posición, desde la cual protegió a muchos presidentes municipales emanados de su partido, pero igual que otros malhechores salió con la cola entre las patas y ahora es el Partido Revolucionario Institucional (PRI) el que controla esa posición a cargo de Luis Manuel González Velázquez.

Nosotros no consideramos posible que los tricolores caigan en los mismos vicios de Casamata. Por el contrario, este desfalco al que parece encaminarse la alcaldía de Jiutepec podría ser un buen instrumento político para mostrar que no todo es color de rosa en la izquierda y hay quienes reproducen con creces las viejas prácticas de corrupción que en su momento dijeron combatir.

Jiutepec sigue siendo uno de los municipios más atrasados, presenta un grave rezago en toda clase de servicios públicos. La alternancia en el poder no le ha generado mayores ventajas. Rabindranath hizo un buen esfuerzo y por eso logró heredar el poder municipal a Miguel Ángel.

Las tendencias son ya muy claras. Los amarillos tienen casi nulas posibilidades de mantener el poder. La lucha cerrada se dará entre priistas y panistas y cuadros valiosos locales como el propio Rabindranath. Jugarán por la vía de la corriente del ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, quien seguramente repetirá en esa candidatura en el 2012.

Incluso se ha dicho de él que pudiera ser el candidato a gobernador del movimiento lopezobradorista. Hay quienes le disputan el espacio; uno de ellos es Juan Salgado Brito.