Claro, en lo que tiene que ver con el senador Adrián Rivera no tiene la mayor trascendencia: todo mundo sabe que el señor anda que rasca por ser cuando menos aspirante a la primera magistratura. Pero se cuestiona la inclusión del titular de Salud, Víctor Manuel Caballero Solano, porque como titular de esa dependencia del Poder Ejecutivo pierde seriedad y credibilidad en su trabajo.
Personas cercanas al mandatario sostienen que la intención en todo caso ha sido tratar de quemar esa propuesta que, efectivamente, es parte de la estrategia del futuro electoral de Adame Castillo. Pero éste no era el momento de empezar a abrir fuego.
Por el lado que se le vea, como que para los intereses del actual grupo en el mando no es apropiado empezar a pensar ya en el sucesor. Finalmente, la presencia adelantada de políticos con aspiraciones, en este caso a la gubernatura, contribuye al debilitamiento del liderazgo de quien encabeza las instituciones públicas.
El problema es que de unos años a la fecha los acelerados empezaron a adelantar tiempos. Aún recordamos que tres o cuatro años antes de la elección presidencial del 2000, ya Vicente Fox Quesada, siendo todavía gobernador de Guanajuato, inició su campaña por dicha candidatura, y eso ha sembrado antecedentes.
Qué decir de un Andrés Manuel López Obrador candidato perdedor por la presidencia de la república en 2006, que nunca ha dejado de hacer proselitismo.
Seguramente la intención de la dirigencia estatal panista lo que quiere es medir las reacciones a los destapes, empezar a cabildear para ir calculando el terreno y sobre todo la aceptación o rechazo de ciertos sectores sociales.
A partir de los escalofriantes resultados que obtuvieron en las elecciones del año anterior, los azules se consideraron casi fuera de la contienda del 2012, es decir, se sentían derrotados anticipadamente.
Al parecer, los desaciertos de los priístas en el Congreso local les vienen devolviendo la esperanza de una eventual prolongación del mandato, y tratan de hacer cálculos para poder aplicar las estrategias conducentes.
Pero de la manera que sea, al secretario Caballero le han provocado un gran problema de legitimidad en el cargo y de paso le agitan las aguas a Adame Castillo que busca un ambiente a modo para poder apretar el paso en el 2011 y desarrollar una serie de proyectos con tendencia electoral.
G. Rebolledo, asesor en Tlaltizapán
Y en otro tema, mientras la Contraloría de Gobierno anda tras los pasos del ex edil de Zacatepec, Gustavo Rebolledo Hernández, por presuntos desvíos financieros durante su administración, éste cobra nada menos que 60 mil pesos mensuales en calidad de "asesor" del presidente municipal de Tlaltizapán.
El caso es sumamente grave porque los datos refieren que Rebolledo es cuñado del edil de esa localidad, lo cual sería un delito de nepotismo que debiera agregarse a las agravantes que persiguen al "rey chiquito" de Zacatepec.
No sólo eso, quienes han proporcionado datos al respecto, sostienen que como asesor viene maniobrando y sacando recursos de Tlaltizapán para cubrir débitos que dejó pendientes en su municipio, y eso deberá ser objeto de investigación. No se puede llegar a tanto. Pero aquí quien puede complicarse la vida es el edil en turno.
Y hay además menciones en el sentido de que Rebolledo está detrás de la contratación de Annuar Fernando Cárdenas, coordinador general de la Policía en aquella demarcación, quien se ostenta como abogado aunque sólo terminó el segundo semestre de la carrera.
Total, que las cosas andan algo preocupantes para el ex alcalde de Zacatepec que está siendo requerido por la contralora Patricia Mariscal Vega, quien en su oportunidad advirtió que va con todo contra él porque "de una serie de requerimientos que se le demandó para probar gastos, no aportó un solo documento".