El mes de noviembre me gusta por todo lo que representa nuestra tradición de honrar a la muerte. En nuestro país esta costumbre de poner ofrendas, sigue manteniendo elementos autóctonos combinados ahora con temas y materiales de actualidad. Obviamente lo que no puede faltar en una ofrenda es el pan de muerto, el cual tiene su origen en la época de la Conquista, cuando se practicaban los sacrificios humanos. Los españoles encontraron tan violenta esta práctica que sugirieron se preparara un pan de trigo cubierto de azúcar roja, que simulaba el corazón de las doncellas, sin que tuvieran que perder la vida. Y ahora podemos comer este manjar acompañado de un arroz con leche, un atole, o un café negro. Otro elemento en las ofrendas es la fruta. Y me refiero a la fruta de temporada: naranja, mandarina, guayaba, tejocote. Todas ricas en vitamina C; no cabe duda que la naturaleza es sabia. Nos brinda estas ricas frutas enriquecidas con esta vitamina, justo cuando el cambio de temperatura nos pega y nos podemos enfermar de gripa o de la garganta. En casa tenemos un árbol de mandarinas que se llena del fruto, es muy generoso nuestro árbol, nos brinda mandarinas a manos llenas. En casa el que más disfruta de esta fruta es mi perro Goyo, ama comer mandarinas, en estas fechas te le acercas y siempre huele a este cítrico. El mismo escoge la que quiere, brinca, la baja del árbol, la pela y se la come con calma, <3 el que sabe, sabe.

Sabían que este místico evento del Día de Muertos, es un ritual catalogado en el 2003 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad? Ahora nuestra tradición forma parte de la lista del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, que quiere así que "sus actores tengan clara conciencia de su valor”.  ¡Una vez más se nos reconoce la riqueza de nuestra cultura!

Otras obras maestras latinoamericanas distinguidas por la UNESCO como Obras Maestras del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, son: la cosmovisión andina de los kallawaya de Bolivia, las expresiones orales y gráficas de los wajapi de Brasil, el Carnaval de Barranquilla de Colombia y la Tumba Francesa de la Caridad de Oriente.

Siento que después de esta fecha ya perdí mi figura :( pan de muerto, calabaza en dulce… después viene diciembre que viene acompañado de reuniones y brindis. Fiestas ricas en calorías. Después las posadas donde no te puedes negar a un rico ponche y los dulces que te brindan como colación! Definitivamente ya perdí y ya gane. Perdí mi figura y gane unos kilitos de más. Pero qué más da si es una vez al año? No nos preocupemos por los kilos y disfrutemos la vida que es bien corta. Disfrutemos el clima, la comida, las amistades, la familia, ¡valoricemos nuestras tradiciones y vivámoslas al máximo!

Hasta la próxima.

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