Siempre ha existido la necesidad imperiosa de encontrar el amor donde sea y como sea. Inclusive hay gente que no puede vivir si no se siente enamorado.
Yo recuerdo que lo de buscar el amor por medio de los periódicos o revistas, donde éstos hacían un espacio para su “consultorio sentimental”, siempre fue muy socorrido. La gente, hombres y mujeres enviaban sus perfiles: mujer bonita busca hombre formal para situación sentimental seria, y agregaban también color de ojos o algún hobby para encontrar un alma afín. No recuerdo muy bien, pero me imagino dejaban alguna dirección para recibir ahí todas las cartas de sus posibles candidatos o candidatas. Puedo sentir e imaginar la emoción de recibir la carta en respuesta al “clasificado”, así como también puedo sentir la angustia de la espera… tal vez semanas para recibir una sola carta. Después de varias correspondencias donde se dejaban descubrir, anexaban al correo siguiente una fotografía… y ahí decidían si le seguían o no!
Hoy las cosas no son tan diferentes en lo que respecta al proceso de mandar o publicar tu perfil en algún sitio web o aplicación, pero aquí con tanta tecnología es muy fácil engañar a la víctima. Por ejemplo, pueden poner una foto de hace cinco años donde estaban súper delgados (as) y fit y ahora ya tienen panza, o donde tenían aun cabello y ahora son calvos. Es decir es más fácil engañar para llegar a una cita. Ahora la respuesta a tu perfil es inmediata, ya no tienes que esperar semanas e incluso en menos de un mes ya saliste con el prospecto unas dos veces.
Sin duda antes era más romántico este rollo, porque recibir cartas de su puño y letra hacían la gran diferencia, incluso podían poner algunos pétalos de rosas o una rosa disecada especialmente para su enamorada; las damas podían perfumar la carta o plantar sus labios con un beso rojo carmín en el papel. Existía el romanticismo y hasta me atrevo a decir que realmente se enamoraban por todos estos detalles aun la persona fuera poco agraciada e inclusive pasaban por alto el aspecto económico.
Hoy lo primero que revisan son sus fotos para ver su casa, su auto o qué tipo de amistades tiene, qué tipo de lugares frecuenta, para checar que nivel de vida tiene, y obvio que todos suben fotos cuando están en buenos lugares y no cuando se están comprando un café en el Oxxo, incluso hay gente que se toma fotos en autos que ni siquiera saben de quién son, los ven en un estacionamiento y aprovechan para tomarse la foto. En fin es muy fácil mentir y la otra parte caer en el juego del engaño.
En una ocasión me llegó una solicitud de amistad en face, él tipo tenía amistades en común conmigo, incluso dos mejores amigos, por lo que decidí aceptar su solicitud, además agrego que estaba soltera. Total que me escribió en inbox y me invitó a salir, después de rechazarlo en varios oportunidades acepté.
¡Sorpresa que me lleve al verlo! Pesaba el triple de lo que yo vi en su foto de perfil, foto obviamente de algunos años atrás. Esa fue la cita de debut y despedida y no fue su sobrepeso lo que lo decidió sino que no hubo química, muy simpático y muy atento pero nada más no. No lo consideré una cita para agarrar galán, pero fue una experiencia! Experiencia que me llevó más adelante a aceptar otra solicitud de amistad de un hombre que no conocía y que no teníamos amigos en común. Lo acepté finalmente porque fue muy insistente, y al mismo tiempo educado y simpático, y desde esa tarde que nos conocimos en una cafetería no nos hemos separado… llevamos cinco años juntos. Mientras nos conocíamos fue un hombre amable y muy romántico. Miles de detalles que tuvo conmigo, flores, poemas, visitas sorpresa, mensajes inesperados, en fin me supo enamorar. Como en todas las relaciones de pareja hay diferencias, pero las normales, pero no por la manera en la que nos conocimos.
Me considero una mujer con suerte, bueno no tanta como la de Megan Markle, que atrapó a un príncipe y que ya nunca en su vida tendrá que lavar un plato y que ya nunca se quedara con ganas de una bolsa, pero no me quejo porque conocí a un buen gordo ;) y soy feliz.
Nunca imaginé conocer a alguien de esto modo, no lo busqué, se dio y me sorprendió, me tiene contenta, sí, fue arriesgado? sí, dada la inseguridad en la que vivimos, pero me la jugué y aquí estoy viviendo un amor en tiempos de redes sociales.
Hasta la próxima.
I love <3