Es el colmo que en estas fechas de fiesta donde celebramos el nacimiento del niño Dios, haya gente que no pierde oportunidad para hacer el mal. Total que he tenido malas experiencias últimamente, entre asaltos y enfrentamientos los días decembrinos se han visto lastimados, pero bueno la situación es enfrentar estos acontecimientos con valor y optimismo. Ser un buen ser humano es uno de los propósitos más populares entre nosotros, pero parece que apenas terminamos de comer las tradicionales 12 uvas cuando ya se nos olvido tan bello propósito. En el mundo hay cada vez más gente inconforme, amargada, frustrada, envidiosa, mala leche pues… que nada más piensa en cómo hacerle pasar un mal rato a alguien más, hay gente que de verdad sale todas las mañanas con la intención de ayudar, de atender al prójimo.
Todo esto sale a colación porque me enteré por las noticias, de una mujer baleada en el centro de Cuernavaca por un espacio para vender en la calle de Guerrero, riña de comerciantes. Por otro lado a mi vecina un borracho que venía manejando la atropelló, bendito Dios ella ya está en su casa. A otro conocido lo asaltaron y le quitaron su celular con violencia, pistola y todo, y a mí también me robaron. Ustedes saben por mí que tengo un negocio de lencería, así como han de saber también que esta fecha es una de las más fuertes para mi negocio por la venta de ropa interior roja y amarilla; por cierto les comento que no nada más pueden usar estos dos colores para el ritual de año nuevo, también pueden usar el blanco para la pureza, o morado para transmutar como ser humano (todos deberíamos usar morado), verde para la salud y rosa. Hay personas que dicen que es mejor el rosa para llamar al amor que el rojo porque también simboliza problemas. Bueno retomo el tema, me robaron toooda mi mercancía roja y amarilla y me quedé sin venta de fin de año, pero bueno lloré, pero de nada sirvió, las lágrimas no me devolvieron mi inversión. Me dio mucho, mucho, coraje porque no se vale que yo trabajo de lunes a domingo y que llegue un flojo a robar y malbarate por ahí el esfuerzo de mi trabajo, grrrrr… fue una experiencia malísima. Pero la cosa no acabó ahí para mí… después de algunos días del suceso del robo, me insultaron en plena vía pública. Iba yo caminando tan fresca con mi conciencia, tranquila, cuando escucho una mujer gritar mi nombre, volteo y la veo, y pensé ¡ay no, es la frustrada ésta!, porque no es la primera vez que lo hace, insultarme en la calle. Y saben, les voy a contar algo que me dijo alguna vez el que fuera director general de este medio de comunicación el ingeniero Mario Estrada Elizondo: “eres una mujer hermosa, inteligente, entre otras cualidades que posees, así que acostúmbrate a que te tengan envidia”. Pues yo no encuentro otra explicación al proceder de esta pobre mujer. Me gritó, así de banqueta a banqueta, que ella me iba a hundir en la cárcel, ¿what? o sea ¿de qué me habla?, ¿cómo?, ¿por qué?, ¿ser lo que soy, una mujer de éxito y feliz, es un delito? ¿Qué le da valor para amenazarme con una estupidez como esa así como así? Y miren, yo soy muy pacífica y que para nada me presto a esos espectáculos que se me hacen de barrio, de gente sin educación, sin valores, y guardo cordura y no contesto para no hacer la cosa más grande, porque si se trata de ofender, créanme que ella saldría perdiendo, pero las reinas no nos rebajamos a ese nivel. Que se ahogue en su envidia.
Bueno todas estas cosas me entristecen porque hablan de una sociedad en decadencia: gente que roba, gente que insulta, gente que no tiene el valor de luchar por lo que quiere, gente que mata!
Pero sería muy negativo de mi parte pensar que el año termina mal para mí, porque gracias a Dios y a mi trabajo tengo muchas cosas por las cuales estar agradecida, como por ejemplo mi salud. Así que no me desanimo y me pongo mi traje de mujer positiva y dejo atrás todo lo que me haga daño y le abro la puerta a las oportunidades y a las bendiciones que la vida me ofrece.
Les deseo un feliz 2018 y espero en Dios que esta sociedad en la que vivimos se vuelva más humana y menos egoísta.
Hasta la próxima
I love <3