Es la primera manifestación significativa de lo que puede avecinarse si se cumplen los pronósticos científicos para las próximas semanas.
Las lluvias intensas y atípicas pueden generar tragedias en los sitios más inesperados. Por eso se requiere de la participación más activa de los ciudadanos a efecto de que se contribuya a la limpieza no sólo de los cauces de ríos y barrancas, sino de calles y banquetas a fin de evitar taponamientos de graves consecuencias.
Por supuesto, los tres niveles de gobierno deben cumplir las tareas que tienen encomendadas para contribuir a evitar nuevas desgracias.