El frustrado ex candidato a la alcaldía de Cuernavaca fue colocado en la llamada Secretaría de Movilidad y Transporte de manera estratégica para la operación política favorable a la presente administración de gobierno, sin embargo, la lectura sólo remite al desprecio oficial hacia un sector fundamental en la economía, movilidad y desarrollo de Morelos con la designación de un operador político, y en todo caso, en el "premio de consolación" en la colocación del personaje en el área ya citada.
Es una frivolidad muy marcada que no merece no sólo un gremio que da miles de empleos a los morelenses y que demanda orden, sino a un rubro de control vehicular que merece la más eficaz atención por la trascendencia de su naturaleza.