La Ciudad de México anunció ayer medidas desesperadas para tratar de contener los contagios por covid 19 que mantienen desde hace meses a esa entidad en semáforo naranja. Morelos se encuentra en mejores niveles -semáforo amarillo- pero el descuido de la población puede provocar un duro retroceso.
El color naranja significa la suspensión de numerosas actividades económicas y el rojo es la paralización de la economía, algo que en Morelos no nos podemos permitir, por el desastre que ya causó el primer confinamiento.
Usar el cubrebocas, lavarse constantemente las manos con agua y jabón y mantenerse a resguardo cuando no es necesario salir no son tareas especialmente difíciles, por lo que no se entiende que tantas personas sean incapaces de cumplirlas.
Solo la ignorancia y la falta de civismo pueden explicar una actitud tan dañina. Quienes sí cumplen con las medidas sanitarias deben también usar el desprecio social como arma contra los incumplidos. No es gracioso que la gente se exponga a contraer el virus y mucho menos que arriesgue a otros.
Las consecuencias son muy caras, incluso mortales.