Aunque podría ser entendible la postura de diversos grupos de comerciantes ambulantes que exigen la reapertura de las actividades económicas, en realidad esa posición se basa en la ignorancia de los alcances de la enfermedad que desde hace semanas llena de lutos los hogares de Morelos y en general del mundo.
En apenas unas cuantas semanas se han rebasado los 200 decesos por ese motivo. La ignorancia de muchas personas ha llevado a confiarse de que solo los mayores de edad y los enfermos serán afectados.
Los comerciantes que amenazan con instalarse por la fuerza no comprenden que esa actitud es una sentencia a muerte para muchos de los suyos, por el elevado riesgo de contagio del covid-19, pero que insistan habla de su profunda insensibilidad.
Ofrecer su mercancía no les garantiza tener ingresos porque muchos de sus potenciales clientes decidieron confinarse en sus hogares para salvar la vida.
Lo único garantizado es que crezcan los contagios y se alargue el periodo de cuarentena, lo que solo vendrá agravar la situación económica.