Finalmente, las pasiones se desbordaron ayer en las protestas realizadas por ciudadanos de la región oriente, que desquiciaron la ciudad de Cuautla por lo radical de la manifestación.
Independientemente de la justeza que pudiera haber en los reclamos ciudadanos, quienes organizan a la sociedad deben entender que dañar a terceros no es precisamente la mejor solución para resolver los problemas.
Lo mismo se aplica a los ciudadanos de Xoxocotla que cerraron el paso carretero que atraviesa su comunidad.
Su malestar es muy específico pero la forma de manifestarlo afectó a cientos de miles de personas ajenas, que sufrieron en su tiempo y su dinero para llegar a su destino.
En ambos casos, un enrome porcentaje de la población no llegó a tiempo (o simplemente no llegó) a su trabajo o a su hogar.
El primero de julio la población en edad de votar manifestó unanimidad sobre un futuro proyecto de gobierno, pero ahora no se nota por ningún lado esa unanimidad.