Por fin ha comenzado de manera oficial la avalancha de visitantes que los prestadores de servicios turísticos tanto han anhelado.
Aunque la autopista del Sol en su tramo por el territorio morelense tiene serias deficiencia que entorpecen el tráfico (el carril de baja velocidad está en pésimas condiciones) el ansia de viajar potencialmente pone a la entidad en la ruta de millones de viajeros.
Esperemos que no sólo quienes viven del turismo sino toda la población haga lo necesario para que los turistas se sientan a gusto y regresen, como parte de las tareas necesarias para reactivar la actividad económica luego de los daños causados por el sismo.
Por supuesto, no puede soslayarse hacer un llamado a tomar todas las precauciones, para disminuir las cifras de accidentes y garantizar un buen regreso a casa.