Lo dicho por el secretario ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua Juan Carlos Valencia Vargas reviste suma importancia social: el funcionario afirma que la dependencia a su cargo no ha aceptado que se utilice un tubo de menor diámetro al ya pactado en la zona del Paso Exprés donde se abrió el trístemente célebre socavón.
Esa afirmación preocupa, porque la coordinación de Protección Civil -con menos elementos técnicos para avalar algo así- dio por aceptado que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes hicieran tal cambio.
Menor diámetro de la tubería significa menor capacidad, por lo que el riesgo seguiría latente para quienes viven o transitan por esa zona.
Creo que ante la peligrosidad de esa construcción por las deficiencias encontradas (decenas de ellas en un tramo de apenas 14 kilómetros) una adecuada supervisión es lo menos que puede recibir la sociedad morelense, agraviada por la pérdida de vidas y el daño de tan costosa infraestructura.