Jojutla.- El edil de Tlaltizapán, David Salazar Guerrero, aseguró que su contralor y su tesorero no tienen ningún problema para estar en su administración, contrario a lo que opinó un concejal.
El regidor Efraín Castrejón Rivera había cuestionado que el contralor Vicente Rentería Rosales incurre en un “claro conflicto de intereses”, pues aseguró que varias de las demandas contra el ayuntamiento son llevadas por sus hijos, además de que él es apoderado legal de ex regidores que demandaron a la comuna.
Del tesorero Dionisio Emanuel Álvarez Anonales, el concejal aseguró que no cumplía con lo que manda la ley orgánica municipal, pues es licenciado en derecho, no contador, licenciado en economía o administración, ni cuenta con carrera afín.
“Efectivamente, el contralor tenía algunas demandas que estaba llevando (contra el ayuntamiento), algunas asesorías a algunas personas, pero es como todo, te contratan para que demandes o para que defiendas, entonces el señor efectivamente sí estaba asesorando a algunas personas en cuanto a sus demandas pero en cuanto al compromiso que él tiene conmigo es que vamos a limpiar y a sacar a Tlaltizapán adelante”, expuso el edil.
Del tesorero, dijo que es una persona responsable y que él le dijo que el único compromiso es hacer las cosas bien y “ay de él que haga las cosas mal, pues después de todo, los responsables de este administración, son el presidente y el tesorero”.
Aseguró que revisó que cumpliera con la ley, tiene toda la documentación en regla, y pueden demostrarlo ante las instancias correspondientes, en caso de ser necesario.
No obstante, aseguró no tener compromisos ni con él ni con el secretario ni con nadie de la administración para que estén “a fuerza” y si alguien no cumple con los requisitos, se tiene que ir, aunque esté recomendado, aseguró.