El director, Donato Pineda Ocampo –quien cuando asumió el cargo, el año pasado, ya se había anunciado la ampliación–, reconoció que hay un rezago importante en los trabajos, aunque dijo desconocer las razones. “Eso se debe a problemas que no son del hospital, sino de las condiciones de la Secretaría de Obras Públicas del gobierno del estado. No sé el motivo, porque ellos son los que están manejando (el proyecto). Puedo decir que están laborando, están avanzando; lento, pero van avanzando, va un ochenta-setenta por ciento de avance de la obra.”
Recordó que esta remodelación ampliará las áreas de hospitalización, tanto de cirugía, medicina interna, como de ginecobstetricia y pediatría.
El retraso, admitió, impacta en los pacientes, pues deben esperar más tiempo para ser atendidos. “Ha afectado en pacientes que se van programando, eso ha derivado que se vayan prolongando las cirugías, y el tipo de espera por falta de espacio fisco”.
A dos meses de concluir el gobierno estatal, opinó que sí se terminará la remodelación al 100 por ciento, siempre y cuando “le echen ganas”.
“No he hablado con ningún representante de esa obra, pero sí he estado en contacto con el ingeniero de la obra”, finalizó.