Este martes se realizó el acto oficial por el que se crea la dirigencia en Morelos del nuevo Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores de Salud, paralelo al ya existente. Agustín Benítez Toledo, ahora dirigente de la organización sindical, adelantó que el primer reclamo será la regularización de los trabajadores de contrato y reclamar para que se conserven las prestaciones que se han comenzado a eliminar.

Antonio Sánchez Arriaga, secretario general de dicho sindicato independiente, estuvo en Morelos para llevar a cabo la ceremonia de entrega de la llamada “toma de nota”, con lo que se legaliza el surgimiento del nuevo sindicato en la entidad, como parte de la organización que tiene representación en más de 20 estados del país.

Dio a conocer que el nuevo sindicato inicia con el registro de 25 trabajadores, tanto de contrato como homologados y algunos que renunciaron al otro sindicato, el cual es encabezado actualmente por Gil Magadán Salazar.
Sánchez Arriaga dijo que ya cuentan con el reconocimiento pleno legal y su objetivo es agremiar a cuando menos cinco mil trabajadores de contrato que “han estado desprotegidos”.

Sostuvo que la ley permite que haya dos o más representaciones sindicales y aseguró que su agrupación independiente se regirá por el apartado A de la legislación federal del Trabajo. “Aquí se le dará libertad a la gente de decidir en qué sindicato se va a afiliar, porque hay jurisprudencia que nos da la razón”, señaló.

Antonio Sánchez manifestó que lucharán por los 90 días de aguinaldo, la recategorización y mejoras salariales, con un verdadero contrato colectivo que se revisará cada octubre.
Comentó que en total en Salud hay 12 mil trabajadores y cuando menos ocho mil de contrato, a quienes considera como su “universo de trabajo”.
“Le vamos a pedir a Graco Ramírez que tenga la voluntad política porque el 24 de abril del 2014 ya hablé con el presidente Peña Nieto y hay total apertura con nuestro sindicato", aseguró.

Por su parte, Agustín Benítez dejó en claro que hay trabajadores de contrato que no tienen respaldo alguno y cuyas prestaciones están amenazadas.
Refirió que la semana pasada suspendieron los alimentos a los trabajadores de contrato del Hospital General de Cuernavaca, además de que ellos ganan menos que los de base y no cuentan con pases de salida ni permisos. “Suponemos que no está enterada la secretaria de Salud, Patricia Mora, y esperamos que lo reconsidere”, añadió al comentar que en todo el estado son cerca de cinco mil personas, con jornadas acumuladas de 12 horas.