El domingo por la noche un hombre de 34 años de edad fue retenido por habitantes del poblado, luego de que fuera señalado de intentar abusar sexualmente de dos menores de edad y una mujer. El individuo fue llevado a la plaza pública de la comunidad, donde fue golpeado por la turba enfurecida. Cerca de las 23 horas, finalmente fue entregado a elementos policíacos y remitido al ministerio público.
El representante de la CIDH expresó que “desafortunadamente la situación es grave, incluso en diferentes colonias se han colocado mantas en las que llaman a linchar a secuestradores y otros delincuentes, lo que conlleva a la llamada ley del talión, del ojo por ojo y diente por diente. Eso sólo implica la ausencia de autoridad y de justicia”.
Recordó que en Morelos ya se han registrado en años anteriores linchamientos, por lo que la situación de intento, no es menor.
Destacó que se trata de un problema de justicia, porque ese tipo de actos populares no significan justicia porque puede ocurrir que identifican en lo inmediato a un presunto delincuente.
También lamentó que en redes sociales “hay quienes lo festinan porque se alienta el odio, la violencia, la justicia por propia mano en un estado de conmoción”.
“A mí me parece que el llamado es a la autoridad. En primer lugar porque estas acciones son derivadas de la impunidad que prevalece en el estado de Morelos”, aseveró.
Señaló que las recientes declaraciones de los gobernadores de Morelos y de Veracruz sobre los niveles delictivos en ambas entidades, “son declaraciones totalmente cuestionables porque no son capaces de reconocer la violencia, la delincuencia que se vive en el estado. Y al compararnos con Veracruz, según demuestran que estamos mucho mejor. Pero la verdad es que deberían reconocer lo que la situación está mal y ponerse trabajar; no se trata de decir quién está peor”.