Las instituciones confiables, según la Condusef, son los bancos, las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, las sociedades financieras populares, las sociedades financieras comunitarias, las uniones de crédito que cumplan con los requisitos de ley, las sociedades que se encuentren operando en términos del régimen transitorio de la Ley para Regular las Actividades de las Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo y de la Ley de Ahorro y Crédito Popular, y las sociedades que, con base en las disposiciones anteriores, cuenten con un nivel básico de operaciones y no requieran autorización.
Asimismo, manifestó que existen otras sociedades que sin estar debidamente autorizadas o permitidas de conformidad con la ley, captan recursos del público, ofreciendo y posiblemente engañando a las personas con la promesa de obtener excelentes rendimientos, incluso superiores al diez por ciento anual, sin embargo, esto es motivo de alerta porque se debe cuidar el patrimonio al buscar una opción para el ahorro o la inversión.
Por lo anterior, la recomendación es que antes de contratar un producto o servicio con cualquier sociedad, los usuarios se informen si la institución está autorizada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) o bien, si por lo menos está en dicho proceso.
Actualmente existen 56 sociedades cooperativas de ahorro y préstamo y 37 sociedades financieras populares autorizadas por la CNBV, las cuales entran al marco normativo de la Condusef y su riesgo es bastante inferior a aquéllas que no tienen una autorización.