Clemente mantiene sus clientes en su colonia, a pesar de la pandemia.
“A mí la pandemia no me ha afectado mucho, ya que la gente de mi colonia ya me conoce y ya me hice de mis clientes” comentó Clemente Castañeda, quien se dedica a vender helados en su carrito dentro de la colonia Teopanzolco, el único lugar que recorre con su mercancía.
“Por lo regular solo vendo aquí en la colonia. No tengo que salir mucho porque aquí todos me conocen y gracias a Dios siempre me compran”.
El heladero cuenta que no eleva el precio de sus productos: “las cosas suben de precio siempre por estas fechas y la verdad yo no le subo mucho a mis nieves y paletas para que mis vecinos me compren y puedan disfrutar de un postre rico”.
“Al principio yo no quería usar mucho el cubrebocas porque uno no está acostumbrado a eso. Lo empecé a usar porque mis clientes me decían que me cuidara y que me protegiera, sobre todo porque soy una persona mayor y corremos más riesgo y por higiene también, aunque yo siempre tengo todo limpio. Después de eso ya lo uso cada que salgo de mi casa, para que también ellos se sientan confiando en mi” aseguró Clemente Castañeda.