El desarrollo rural es una de las condiciones para el turismo de aventura en cualquier país, afirmó Elena Dorado Mayorga, investigadora de la Universidad Nacional de Costa Rica, durante una conferencia virtual dirigida a docentes de la Escuela de Turismo de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).

“El desarrollo rural debe tener en cuenta la cultura tradicional local, ya que el medio rural es indisociable de su cultura propia porque las acciones de desarrollo rural se mueven entre el desarrollo social y el económico”, dijo, al señalar que en el turismo de aventura se encuentra implícito conocer lugares, su gente y su cultura de manera activa y participativa, y se clasifica en: cicloturismo, turismo rural, senderismo, escalada, tirolesa y rappel.

En su conferencia: “Dinámicas rurales en el turismo de aventura: caso Costa Rica”, Elena Dorado Mayorga sostuvo que el desarrollo rural contribuye a mejorar el bienestar de quienes viven en este medio, porque son el hogar de la mayoría de los pobres del país.

Señaló que se deben identificar territorios rurales especializados o dedicados a la ganadería, agricultura, pesca y minería, para el desarrollo del turismo en espacios rurales como el ecoturismo, agroturismo, turismo rural comunitario, entre otros.

Estas actividades productivas, expuso, configuran el paisaje rural y, dependiendo del éxito de las actividades, experimentan procesos de migración dadas las condiciones de trabajo y riqueza que ofrece un territorio.

Planteó que uno de los fines del desarrollo rural es la modernización de las explotaciones agrícolas, la seguridad y calidad de los productos alimenticios, ingresos equitativos y estables para los agricultores, incorporación de las exigencias medioambientales, desarrollo de actividades complementarias o alternativas generadoras de empleo para frenar el éxodo rural y reforzar el tejido económico y social de los espacios rurales y mejorar las condiciones de vida y de trabajo e igualdad de oportunidades.

En este contexto, explicó que el turismo de aventura implica la exploración o el viaje hacia áreas remotas donde el viajero puede esperar lo inesperado, “el turismo de aventura está aumentando rápidamente, subió su popularidad, ya que los turistas buscan vacaciones inusuales diferentes de las típicas vacaciones de la playa”.