Unos 250 comerciantes están en esa situación; solicitan apoyos oficiales ante el alargamiento de la cuarentena.
Ante la emergencia social causada por la propagación del coronavirus, 250 comerciantes de las plazas Lido y Degollado se declararon en quiebra.
Mario Lara López, presidente de la Coalición de Comerciantes de las Plazas Lido y Degollado, confirmó que la mitad de los locatarios no podrá reabrir sus negocios después de la contingencia.
"No tienen para pagar renta, energía eléctrica, agua, a proveedores, comprar materia prima, tienen que pagarle a los empleados, y lógicamente no venden y no generan recursos, por lo que les es difícil sostenerse", explicó el líder comerciante.
Lara López explicó que la situación que enfrentan es insostenible, pues con sus negocios cerrados no sólo no tienen recursos para pagar sus rentas, sino que no pueden llevar el sustento a sus hogares.
"Es una situación muy lamentable ante la falta ingresos, al prolongarse la cuarentena por el virus hasta finales de mayo va a ser muy difícil para los comercios pagar las nóminas”, añadió.
Por el cierre de los 500 locales se perdieron al menos 300 empleos directos y 100 indirectos, por lo que urgió a los gobiernos federal, estatal y municipal apoyar realmente a los micro y pequeños empresarios.