Comunicadores y camarógrafos aplican medidas de seguridad en grupos.
Conforme las autoridades federales, estatales y municipales han intensificado las medidas preventivas contra el Covit19, las reporteras, fotoperiodistas y camarógrafos han desarrollado y aplicado sus medidas de seguridad en grupos.
Entre los reporteros de “a pie”, como se denomina en el gremio a quienes todos los días salen a las calles a realizar coberturas, hay prácticas preventivas que se han ido generalizando desde la fase 1 hasta la fase 2, en la que Morelos se encuentra hasta hoy.
Por ejemplo, a los entrevistados se les pide que guarden la “sana distancia”, es decir, la separación entre personas de entre un 1.50 y dos metros, y que no saluden de beso, abrazos o estrechamiento de manos.
Una vez que se efectúa la entrevista, los celulares son desinfectados con antivirales.
Es bastante complicado aplicar la sana distancia entre los propios reporteros, pero poco a poco esta práctica va siendo más aceptada.
La protección con cubreboca durante la labor periodística es también frecuente, y aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que sólo se lleve la mascarilla si se tiene tos o estornudos y que éstas sólo son eficaces si se combinan con el lavado frecuente de manos con una solución hidroalcohólica o con agua y jabón, varios grupos de reportera y reportaros la usan por el simple hábito: “sabemos para qué sirve, pero la usamos porque nos da una especie de ‘seguridad’”, dijo una reportera.
Algunas reporteras tienen todo un kit preventivo: cubrebocas, gel antiviral, gel antibacterial, alcohol, guantes de látex, etc.
Uno de los reporteros que da coberturas en Cuernavaca y en sur de Morelos afirmó que en la capital del estado es donde las reporteras y reporteros han aplicado de manera más disciplinada estas medidas, pero en algunos municipios de la zona sur no.
“Nosotros tenemos la información que se genera de primera mano y como garantes del derecho a la información debemos actuar con profesionalismo y responsabilidad, proveyendo a la sociedad de una información objetiva y verás. Aquí es cuando más cuidado debemos tener con lo que documentamos y mandamos a las redacciones. La gente cree en nosotros. Y por otro lado debemos ser muy responsables de nosotros mismos, de nuestra salud y de la salud de nuestros compañeros y aplicar rigurosamente las medidas preventivas, no solo como cualquier ciudadano, porque nosotros no estamos dentro de nuestras casas. De por sí esta es una profesión de riesgo y ahora con la pandemia se vuelve peligrosa, por eso debemos cuidarnos más, afirmó.