Agustín Benítez Toledo, secretario de la sección 6 del Sindicato Independiente de Trabajadores de Salud, aseveró que el recorte presupuestal y el despido de al menos 200 trabajadores afectará a la población. Como mínimo, señaló que se alargarán los tiempos de espera para consulta, cirugía y demás servicios.

El representante de dicha agrupación independiente aseveró que "en la actualidad la capacidad instalada que se tiene en los Servicios de Salud de Morelos de por sí ya está rebasada y hay menos personal del que se necesita, entonces si anuncian un recorte de 200 trabajadores, eso definitivamente va a disminuir la calidad de la atención". 

Sostuvo que en el último despido de 29 personas, se trata de enfermeros expertos en terapia intensiva, lo que calificó como "lamentable por el detrimento que eso significará para la salud". 

Comentó que se acordó con la secretaria de Salud, Patricia Mora González, revisar si había causales y si había pruebas de que el despido ocurrió por la incapacidad de esos trabajadores. 

Por otro lado, advirtió que naturalmente aumentará la carga de trabajo para los médicos y enfermeras que permanezcan y si a eso se suma la universalización, "obviamente se atenderá a más pacientes con menos personal. Siempre lo hemos hecho porque hay cero rechazo, pero la carga de trabajo va a crecer". 

Debido a la gran demanda de unidades como el Hospital General "José G. Parres", será necesario que se trabaje en combatir el desabasto de insumos y medicamentos.

Para la población "el tiempo de espera será mayor para atención de primer nivel o de personas que requieren alguna atención que no pone en peligro la vida. 

El representante de dicha agrupación llamó al gobernador del estado "a que no dañe a la población con recortes en educación y salud y que esa disminución de 20 millones de pesos de fondos federales, la apliquen en gasto corriente y no en recursos humanos de atención médica".