Comentó que ya se han dado pláticas con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y con la empresa Geo y sólo están en espera de que les sea presentado el proyecto de la magna obra.
Cuestionado sobre cómo actuaría el Ayuntamiento ante la ejecución de dicho proyecto, el edil capitalino dijo que “siempre en el marco de la ley, siempre con un gran respecto y ojalá que por el desarrollo de Cuernavaca haya un convencimiento de ambas partes”.
El distribuidor vial es un eje que uniría la autopista México-Acapulco en el tramo que pasa por Cuernavaca a la altura de la colonia Lázaro Cárdenas, con el eje norponiente que también se pretende construir, y, del mismo modo, habría una conexión con el aeropuerto internacional de Tetlama y la zona habitacional que edifican las empresas GEO y ARA.
En tanto, durante un recorrido realizado en la colonia Lázaro Cárdenas varios habitantes colocaron cartulinas en las puertas de sus casas, en las que manifiestan que no están dispuestos a vender sus propiedades.
Y es que refieren que es el único patrimonio que han forjado, donde pasarían su vejez y la herencia que dejarían a sus hijos.
En este sentido, el secretario de Desarrollo Urbano, Obras, Servicios Públicos y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cuernavaca, Rafael Eduardo Rubio Quintero, reiteró que la obra es completamente federal, y lo único que haría el Ayuntamiento sería otorgar las licencias y los permisos respectivos una vez que les sea presentado el proyecto y valoren los estudios de impacto ambiental, estudios viales, entre otros.