“Las faltas más frecuentes de los partidos políticos y candidatos consistieron en omitir registrar gastos y no comprobar gastos. Es decir, ahí donde se detectaron problemas fue en el egreso, no en el hecho de recibir dinero opaco o de entes prohibidos. Puede decirse que las campañas se financiaron con dinero limpio”, precisó Ciro Murayama, consejero del INE y presidente de la Comisión de Fiscalización.
Además, el funcionario federal electoral abundó que “la no comprobación de gastos y la presentación de pólizas sin soporte documental implicó sanciones agregadas por 179 millones de pesos, es decir, el 45.7% del total de las multas. El no reporte de gastos dio un monto de sanción en las campañas federales y locales de 175 millones de pesos, el 44.7% de las multas. En suma, la no comprobación de gastos y el no reporte de los mismos representan el 90.4% del total de las sanciones”.
Las sanciones a nivel federal dan un promedio de 11.1 millones de pesos por partido político.