Por su parte la investigadora de la empresa Onsite Laboratorios de México, Susana Elizabeth García Ballesteros, manifestó que a simple vista puede apreciarse que el depósito de los desperdicios no se da bajo la normatividad ambiental del país, por lo tanto la clausura del basurero es legal y no es posible que se sigan tirando los desechos en Loma de Mejía.
Lo anterior fue explicado tanto al representante de la empresa Promotora Ambiental, Raúl Molina; como a las directoras del área de Ecología del ayuntamiento de Cuernavaca, Marisol Amador Flores; y de Protección Civil municipal, Claudia Aponte Maysse.
En este sentido, las funcionarias municipales explicaron que quitar los sellos de clausura en el depósito de Loma de Mejía tiene como intención que se hagan las inspecciones técnicas correspondientes, y de los resultados el cabildo tomará una decisión sobre si se cierra o no el relleno sanitario.
Cabe destacar que será el próximo domingo cuando concluya la inspección en el relleno sanitario de Loma de Mejía y con posterioridad se conocerá el dictamen. De dicho resultado depende la clausura definitiva del tiradero.
Por otro lado, el director general de la empresa Estudios y Planeación Ambiental, Enrique Tolivia Meléndez, dijo que la falta de compromiso de Promotora Ambiental (PASA), encargada de la recolección y depósito de la basura de Cuernavaca, fue lo que provocó el incendio el pasado domingo 14 de marzo.
“En los rellenos sanitarios que cumplen con las normas no hay cabida para ningún tipo de incendio aún provocados por la mano del hombre, porque la basura es separada y aún cuando esté expuesta a temperaturas extremas suelen tener un tratamiento especial, que los concesionarios no realizan, y por lo tanto hay una evidente contaminación ambiental que suele olerse al momento de la llegada al tiradero de basura”, destacó.