Lo anterior, según consta en el expediente 249/2010 cuya sentencia fue publicada en estrados del Tribunal Unitario Agrario la semana pasada y que a la letra dice:
“Es procedente reconocer el cumplimiento de las consecuencias legales que han generado los actos y acuerdos tomados en la asamblea general de comuneros de Tepoztlán, municipio de su nombre, Morelos, de dos de octubre de mil novecientos noventa y cuatro, en la que se aprobó el proyecto habitacional a edificar en el predio Acolapa, así como los acuerdos del cinco de noviembre de mil novecientos noventa y cuatro y tres de marzo de mil novecientos noventa y cinco; también es procedente el reconocimiento como centro de población el asentamiento humano ubicado en el predio antes mencionado”, consideró la magistrada Luz Mercedes del Carmen López Díaz, titular del TUA.
El conflicto tiene sus orígenes en este predio declarado propiedad del municipio de Tepoztlán desde 1929, pero que los comuneros de esa localidad indebidamente vendieron a particulares, pasando la propiedad por varias manos hasta llegar a la empresa Ecoland, que a su vez se la vendió a Evigro, hoy llamada “Geo Morelos”.
El 2 de octubre de 1994 la asamblea de comuneros de Tepoztlán autorizó el proyecto habitacional Acolapa a cambio de 30 mil pesos y diversas obras, pero posteriormente desconocieron dicho acuerdo.
Lo mismo ocurrió con el Cabildo del Ayuntamiento de Tepoztlán, que el 7 de octubre de 2009 aprobó en sesión el reconocimiento de dicho asentamiento humano, pero hasta el momento no ha otorgado los servicios municipales correspondientes, a pesar de que en su momento el Ayuntamiento en turno otorgó los permisos de uso de suelo y licencias de construcción.
Todo esto provocó la inconformidad de los condóminos de la Unidad Habitacional Acolapa (que alberga a más de cinco mil habitantes en unos mil 500 departamentos) quienes realizaron diversas movilizaciones ante el Congreso Local y los municipios de Tepoztlán, Jiutepec y Yautepec, toda vez que dicha unidad se encuentra en una zona limítrofe entre estas localidades, pero ninguna se quería hacer cargo de los servicios que requerían.
La empresa Geo Morelos interpuso una demanda ante el Tribunal Agrario para exigir el cumplimiento de dichos acuerdos, la cual quedó registrada con el numeral 249/2010 y fue resuelta a finales del 2011, pero fue hasta el pasado mes de febrero que quedó debidamente notificada a las partes.
La sentencia establece que “procede el reconocimiento del asentamiento humano y su correspondiente regularización a favor de Geo Morelos S.A. de C.V. y se ordena la segregación, delimitación o deslinde de la zona urbana del núcleo agrario denominado Tepoztlán (…) física y material, así como su graficación en el plano definitivo de ejecución, respecto de una superficie aproximada de 148 mil 100 metros cuadrados, que será definida en ejecución de sentencia, comprendida en la poligonal del predio conocido como Acolapa”.
El documento en cuestión señala también que “se apercibe a los demandados (Bienes Comunales y Ayuntamiento de Tepoztlán) para que en lo futuro se abstengan de molestar y perturbar los derechos adquiridos por la persona moral actora en este juicio”.
Termina diciendo que se notifique a las partes y una vez que cause ejecutoria, previas las anotaciones que se hagan en el libro de Gobierno, archívese el presente expediente como asunto total y definitivamente concluido.