Cuando te gusta una persona lo primero que quieres hacer es conquistarla e invitarla a salir, pero a aveces algunas técnicas de ligue no son las indicadas y terminan arruinándote el proceso, tanto que provocan que esa persona quiera alejarse de ti.
Es verdad que el “ligue” ha cambiado con los años y parte de esto se debe a las redes sociales y a la tecnología, esto ha dado pie a distorsiones en los modos de conquista que terminan por incomodar a cualquier persona y no querer que le vuelvas a escribir en su vida.
Entre los hombres se han dicho miles de técnicas de conquista y cuando las quieres llevar acabo notas que ninguna de éstas te ha funcionado.
A veces, algunos chicos, no tienen en mente que muchas de éstas pueden incomodar a la otra persona y que no son para nada atractivas para las mujeres; entonces te das cuenta de que es hora de actualizar esos modos de ligue, que te des cuenta de tus errores y que observes cómo te puedes acercar a alguien más.
1. Esperar 3 días para llamarla
No. Ninguna chica quiere que le hables 3 días después de la primer cita, menos si se sintió bien a tu lado. Si ambos la pasaron bien, entonces se buscarán inmediatamente y la iniciativa será recíproca.
2. Decirle algún apodo “bonito”
Es verdad que cualquier apodo “cursi” es bonito cuando te lo dice la persona que te gusta, pero eso suele ser incómodo cuando apenas están en el plan de ligue y si empiezas con un “bebé” la primera conversación lo único que ella pensará es que estás intenseando.
3. Interrogar en lugar de hablar
Las citas no son para que le hagas un examen con preguntas sobre su vida. Lo mejor es que tengan tema de conversación y sólo dejen que fluya todo. Intercambiar puntos de vista, gustos y una que otra curiosidad.
4. Ser intenso
No seas tan insistente, ella sólo querrá perder el contacto contigo. No vayas demasiado rápido, ten paciencia y dale su espacio.
5. Que siempre le des la razón
Es un mito cuando dicen que a las mujeres siempre debes darles la razón. Lo único que ella pensará en ese momento es que no le estás prestando atención y que no tienes decisiones propias.