El turismo es una actividad de creciente importancia en el estado de Morelos y, más que nunca, los prestadores de servicio cobran vital importancia. El valor de los profesionales del turismo radica no sólo en el desarrollo de una visión de recursos humanos que tiene la capacidad para dar atención, calidez y profesionalismo al turista; también es el capital humano el que hace propuestas creativas y llenas de significado para generar experiencias únicas e irrepetibles a los visitantes, a partir de su identidad y contexto.
Pueblos como Santa María Ahuacatitlán, en Cuernavaca; ricos en historia, tradición, usos y costumbres, son muestra clara del empuje y compromiso de las comunidades indígenas, vinculadas poderosamente con la naturaleza. El espíritu de cooperación y el deseo de encontrar fuentes alternativas, ha sido un elemento inspirador para representantes de la comunidad, y de forma muy especial de mujeres, que se han dado a la tarea de compartir saberes y conocimientos ancestrales, reforzando sus valores como la solidaridad y el compromiso con y para el pueblo.
El Parque Ecoturístico el Bosque de los Hongos Azules, ubicado en el paraje denominado “El Cajetito” de Santa María Ahuacatitlán (Municipio de Cuernavaca) se inscribe dentro de las áreas naturales protegidas de Morelos. Desde su creación, el parque ha procurado dar vida a la comunidad y, mediante un proceso de formación permanente y trabajo multidisciplinario, ha transformado poco a poco la forma de ver e interactuar con la naturaleza. El proyecto inició en el 2008 y desde entonces, basa sus acciones en valores tales como la unión de la comunidad a través de sus creencias, identidad, colaboración y el respeto y cuidado al medio ambiente.
Como muestra del agradecimiento por el privilegio de pertenecer y poder crecer en una tierra que les brinda no sólo sus frutos, sino también el orgullo de pertenencia se ha fortalecido a través de la procuración de una vida digna en el presente, contribuyendo al futuro exitoso y sustentable de las generaciones venideras. De igual forma se ha dado a la tarea de recuperar saberes de la comunidad, resaltando la riqueza del conocimiento tradicional, creando un espacio de aprecio a las bondades de la tierra, la naturaleza y el clima a través de iniciativas de educación ambiental.
El desarrollo creativo de propuestas turísticas basadas en ecotécnias así como en procesos de educación y divulgación, provocan efectos de creciente beneficio para las comunidades: conducen a conocer para saber, saber para actuar y actuar para preservar, recuperar el pasado y profundizar sobre los acontecimientos históricos de los pueblos… contribuyen a la formación de profesionales protectores del mudo a través de acciones locales pletóricas de identidad.
Ven al Bosque de los Hongos Azules en Cuernavaca y vive una experiencia verde única en la ciudad.