En cada ciudad hay autores que experimentan, se recrean y encuentran en un género que si bien no es nuevo del todo, renació—según Lauro Zavala— a finales del siglo pasado con particular fuerza en nuestro idioma.

Con la intención de difundir el género y de llevar al lector escritura fresca, hoy presentamos una breve muestra de autores morelenses, ya sea porque ahí nacieron, viven o crecieron.

Varios de ellos pertenecen a El Club de los Ficcionarios. ¿Son buenos, regulares, malos? Usted tiene la última palabra.

DEMORA

—¡Oye, tú, espera! ¡No cruces! Vengo del futuro para decirte que vas a mori... ¡Chale, otra vez tarde!

—Eduardo Oyervides

LA GRIETA

Se colocó frente al espejo, vio la inmensa grieta en él, tiró los cosméticos a la basura, se puso una gran sonrisa, encendió su cerebro, se llenó de confianza y salió de la habitación. Cuando cerró la puerta, el espejo curó su grieta y sonrió.

—Yulyl Contretas Míguez

OBSESIÓN DE NADA

Sumergida en la transparencia de tu oscuridad, camino a bocanadas por los rincones de tu ausencia, desafiando los niveles inconscientes de protección de mi espíritu deseo con profunda obsesión obtener tu alma y desvanecerme en ella.

—María Barona .G

SINCERIDAD

Las únicas mentiras que me creo, son las mías.

—María Barona .G

GATOS ALBINOS

No había más sombras que el silencio derrapando carcajadas. Los techos eran fuego a punto de quemar la espalda. Tres gatos albinos jugaban baraja en la barda de mi vecino, harto de escucharlos pelear todas las noches. La mejor apuesta: no dejarlo dormir.

—Karina Castillo

SUEÑOS DE MADERA

En sus Memorias, el Chico de madera escribió que los primeros 200 años de su vida los pasó de pie en medio del bosque y que su deseo para el futuro es formar parte de algún libro, tanto impreso como digital, donde se analice la ficción de la verdad y la mentira.

—Víctor Marcos Hernández

EL MEJOR BISABUELO

Yo tuve al mejor bisabuelo. Cuando quería verlo, siempre estaba disponible para mí. Me miraba de frente, con ojos serenos, pero enigmáticos. Nos comunicábamos sin palabras. Mis pensamientos no lo escandalizaban: al contrario, parecía entenderlos sin juzgarme en absoluto. Aunque era de carácter fuerte, jamás le conocí un acceso de cólera. Su cabello, abundante, nunca oscureció con las canas. A su rostro apenas lo cruzaron algunos surcos, sólo para darle más expresión. Lucía una juventud que el tiempo inmortalizaba. Yo tuve al mejor bisabuelo: era un retrato colgado en la pared.

—Gabriela Lira

LA DICTADURA PERFECTA

Concentraban masas, creaban listas, seleccionaban favoritos, eliminaban o bloqueaban a opositores, adoptaban falsas identidades, hacían tareas de espionaje, restringían información, suprimían comentarios, calumniaban a rajatabla, y permanecían sentados, en total impunidad, mientras se tomaban un cafecito en el Starbucks.

—Gabriela Lira

MIERDA

Sueño que alguien nacido de la oscuridad me apuñala y me abre el vientre en mil anuncios fluorescentes. El ominoso recuerdo de ese aroma al abrir los ojos no reconforta, asfixia. Camino entre la consciencia y el desmayo a través de la neblina teñida de ámbar por los faroles. Alcanzo a ver las marquesinas neón. Un motel de paso. Intento acelerar el ritmo de mi huida. Imposible dado el peso de mi carga y la destreza del asesino. Una puta me abre la puerta, pone un dedo sobre sus labios y despacito me pide silencio. Al entrar busco el espejo monstruoso y me da miedo mirar. Desde el otro lado me observo cargándome las entrañas. Al despertar respiro aliviado. Ya sólo tengo que limpiar la mierda.

—Ariel Alejo

TESTARUDO

Se regocija cuando mira la luz en sus ojos miel. En un solo acto su espíritu se congela y se funde al presentir el mínimo roce de piel a piel. Después, viene el acecho, la realidad de ambos. Nada hay, nada existe, solo un par de corazones latiendo fuerte, con el temor de que la hipócrita sociedad los escuche.

—Cecilia López

EL TECHITO

Aquí debajo del tejado que cimbró mi abuelo, te escribo. Debajo te anhelo, debajo te pienso. Debajo te sonrió. Debajo te espero, debajo. Siempre debajo como cuando te conocí, debajo siempre de ti, sin conseguir alcanzar una auténtica mirada tuya, regalada o vendida.

—Cecilia López

AMANTE

Es el filo de la hoja que corta con la precisión exacta de las manecillas del reloj, es el veneno que te mata pero no dejas de beberlo.

—Jan Olvera

IMPOSIBLE

Tratar de amar al enemigo y odiar al amor de tu vida.

—Jan Olvera

SILENCIOS

Tus alas que en mis silencios son la libertad, tu inspiración entrecortada en mis labios llenos de ti, ansiosas de mí las palabras que sobran en las miradas que me matan.

—Luisa María Briones Gómez

DISFRAZ

Ese momento eterno cuando tus labios se disfrazaban de los míos.

—Tania Jasso

LOS GUARDABOSQUES

El incendio se detuvo cuando llegó a una hilera de sauces llorones.

—Daniel Zetina

VENGANZA

Cansado de una larga historia de maltratos y asesinatos dolosos, por fin se decidió y el gato mató a la curiosidad.

—Daniel Zetina