El gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu ofreció en su campaña electoral someterse cada dos años a la ratificación de las urnas si lograba el cargo. Y no es la única de sus mentiras, pero sí una de las mas graves, junto con aquella de que acabaría con la inseguridad en 18 meses.
Ambas promesas incumplidas tendrían serias consecuencias si se aplicara la Ley de Participación Ciudadana, por lo que es obvio lo importante que resulta la presión de los grupos sociales para crear los contrapesos que pongan un freno a los excesos de quienes legal o ilegalmente ejercen el poder de una forma tan desastrosa para la entidad.