El gobernador ha tomado esas denuncias -ante la Procuraduría General de la República- tan en serio que buscó el amparo de la justicia federal.
Si fueran señalamientos injustificados seguramente ni se inmutaría, pero el hecho de promover un recurso habla de que existen posibilidades de que efectivamente el dinero proveniente de un crédito autorizado al gobierno estatal haya sido desviado.
Los indicios señalan que se beneficiaron de ese dinero tanto el gobernador como su familia y los allegados, algo que por supuesto deberá probarse.
Pero de llegar a ese punto, las autoridades deberán exigir la responsabilidad inherente a cada mala acción.