Centrada en la evaluación de sus habilidades, los docentes pretenden dar marcha atrás a una reforma constitucional que modifica sus condiciones de trabajo.
Adicionalmente en Morelos los opositores a la medida han sumado la presunta modificación de algunas modificaciones locales, algo que las autoridades han buscado desmentir desde el viernes pasado, aunque no sabemos con qué éxito.
Lamentablemente, los niños y jóvenes que acuden alas escuelas públicas serán los afectados en una lucha gremial que no ha sabido encontrar salidas menos antisociales.
Todo parece encaminado a mantener el auge de las escuelas privadas, que por su forma de operar mantienen sus actividades normalmente mientras los planteles oficiales sufren afectaciones cada vez que hay protestas.