El titular del Instituto de Desarrollo y Fortalecimiento Municipal de Morelos (Idefomm) Rodolfo Tapia López anunció ayer que en 2018 el gobierno federal aplicará otra reducción a los recursos que destina a los municipios, tal y como ocurrió el año pasado.
El anuncio debe resultar muy duro para aquellos alcaldes que por sus problemas financieros están en riesgo de ser destituidos y en general de todos aquellos que esperaban mayores premios cuando se inscribieron en el proceso electoral en el que resultaron ganadores.
Sin embargo, esa información podría hacer que muchos de los que por fines económicos aspiran hoy a encabezar un Ayuntamiento desistan de sus intenciones, pues lograr ese tipo de cargos ya casi equivale a sacarse el tigre de la rifa, como bien lo resume la filosofía popular.
Por lo pronto, habrá un año más de reducciones que repercutirán primeramente en los trabajadores municipales e inmediatamente en los ciudadanos, que dispondrán de aún menor obra pública y de menos servicios públicos.
Eso sí, los ingresos de alcaldes, síndicos y regidores se mantendrán intocables, porque ese insulto no se lo pueden ahorrar.